Sword Art Online - Academia Aincrad

Capítulo 10: Promesa.

Hay situaciones que te puede acorralar, momentos en los que te puedes perder y elegir hacer algo que está mal pensando que es por una buena causa, momentos en los que sigues un idea erróneo, pero cuando te das cuenta es demasiado tarde como para retroceder y solo te queda continuar.

- ¿Qué demonios? – Kibaou sorprendido retrocedió mirando a Asuna con desprecio por no poderle dar el golpe final.

Todo estaba a punto de terminar, ¿Por qué interferían?

- ¿Estas bien? ¿Puedes levantarte? – Kirito se agacho un poco sin bajar la guardia ofreciéndole una mano para ponerse de pie.

- ¿Qué haces aquí? – Asuna tomo su mano, los murmullos en la audiencia comenzaron a escucharse, todos estaban igual de confundidos.

- Hey niño, estas interfiriendo en una batalla, esto ya es una descalificación, pero ¿sabes?, si te largas para que podamos continuar podemos evitar pedir que vengan a echarte. – Kibaou miro desafiante a Kirito mostrando absoluta confianza en sus palabras, ya no podía retroceder, necesitaba seguir adelante para conseguir su objetivo.

Asuna tomo su hombro señalando que se retirara, pero Kirito negó con la cabeza y dio un paso al frente encarando a Kibaou.

- ¿Descalificación? Me parece bastante razonable, pero creo la utilización de programas ajenos a la batalla va mucho más allá de la simple cancelación de un combate. – Dijo Kirito en un tono bajo para que solo Asuna alcanzara a escuchar de lo que estaban hablando.

La expresión en el rostro de Kibaou pareció desmoronarse cambiando a una de confusión y odio, ¿Este sujeto que se creía? ¿Por qué interfería en sus planes? No dejaría que nadie se metiera en su camino.

- ¡Estúpido! – Sin dar aviso alguno le dio una patada en el estómago a Kirito para luego atajar con la espada, que apenas pudo bloquear con la espada terminando hincado mientras intentaba recuperar el aliento, Kibaou se sorprendió un poco, lo habían detenido.

– ¿Cómo te atreves a llamarme tramposo? – Susurro Kibaou para sus adentros, él tenía razón, pero necesitaba hacerlo, no tenía opción, volteo a verlos con determinación de continuar.

Antes de que lanzara otro ataque Asuna lanzo una ligera combinación, ere inevitable que la esquivara, pero aun así retrocedió a tiempo, fue ahí cuando confirmo que Kirito tenía razón.

- Déjalo fuera de esto. – Asuna se puso frente a Kirito que se levantó con dificultad y se puso a su lado. – Es un poco tonto que interfieras sabiendo lo que hace. –

- ¿Ya te disté cuenta verdad? Ya le avisé a Agil, me permitió interferir para que tu decidieras. – Kirito le susurro para evitar que Kibaou los escuchara.

- Ya me parecía bastante raro que de un momento a otro se volviera tan bueno, no sé si pueda ganarle. – Los movimientos de Kibaou eran muy precisos al esquivar, si leía todos sus movimientos seria casi imposible darle la vuelta.

- ¿Qué tanto murmuran? ¿Creen que entre los dos puedan ganarme? – Kibaou comenzaba a parecer desesperado y comenzaba a ver alrededor, si sabían del programa ¿Por qué no habían cancelado el combate? Pero no importaba mientras pudiera vengarse de esos dos.

- El programa carga cuando inician conexión y le toma unos momentos analizar los patrones de ataque del oponente, luego predice la trayectoria e indica al usuario como contraatacar. -

Asuna se mordió el labio inferior, Kirito le estaba confiando la decisión a tomar, la estaba dejando elegir si continuar o retirarse, eso la hacía feliz, hubiera odiado que simplemente llegara a detener la batalla, pero también la llenaba de impotencia el saber que no podría ganar sola contra algo así, pero Kirito la miro tranquilo, sus ojos demostraban confianza.