Capitulo 18

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Me fui caminando al salón y choque con Juan.

- A ti te quería ver -camine hacia mi banca y le di mis cuadernos- Solo quiero que no rompas, rayes o algo parecido le hagas a mis cuadernos porque no respondo- lo mire por unos segundo y me senté-

- Muchas gracias T/N, te juro que no les haré daño -sonrio-

- Pues más te vale que sea así -le dije fría y sin verlo-

Pasaron 25 minutos y la maestra de química no llegaba, algunos se salieron y otros se quedaron otro rato más a esperar, en lo personal me quedé en el salón, no le hablaba a nadie, Cole estaba en clase y no podía verlo así que me quedé viendo mi celular. Fue a buscarme David hace tiempo que no hablaba con el, solo lo veía pasar con su novia.

- ¡Toc, toc Madison- dijo emocionado David-

- ¡David! Que alegría verte -fui y lo abrace-

- Ya lo noté T/N -rio y me separé de él-

- ¿Qué milagro que me vienes a ver? Ya me tenías olvidada -lo hice pasar y lo senté justo enfrente de mi-

- Pues ya vez, no vino el maestro de economía y vine a verte, antes de que preguntes cómo supe que no vino tu maestra déjame decirte que me tocó antes que a ti -rio-

- Valla me has leído la mente -rei- Que bueno que hallas venido a verme, extrañaba hablar contigo... Y aprovechando que estás aquí... Necesito tu ayuda -sonreí-

- Claro Madi, Lara ti lo que sea... Pero antes de que digas otra cosa... -me susurró- ¿Porque el tipo de allá se nos queda viendo? -voltee de reojo y volví a ver a David-

- Larga historia... Después te contaré si aceptas ayudarme- asistió con la cabeza- Bien mira en juicio de mi patria potestad será en 2 meses y quiero que me ayudes con un plan que idee para quedarme con mi mamá -lo miré-

- Bueno mujer cuéntame todo -rio y paro oreja-

- Bien este es el plan...-le conté todo-

- Por supuesto que sí amiga, para ti lo que sea -rio- Pero ahora sí cuéntame lo del chico de atrás- me pare, hice que se parara y salimos al patio-

- Mira es una larga historia... Espero no aburrirte -le conté todo igual como lo hice con Cole, cuando le termine de contar en su cara tenía una cara de asombro de de enojo a la vez por lo que me hizo-

- Eso no se le hace a ninguna chava y menos contigo... Y antes de que digas alguna cosa más yo no cuento, yo soy de chocolate -rio- Pero ya encerio que mala onda del tipo ese, le romperé la cara -se iba a ir pero lo detuve-

- No, no dejalo, no vale la pena, ya pasó hace mucho -moví la cabeza-

- ¿Entonces antes usabas falda? ¿No me digas que por culpa de aquel estu... Estúpido ese cambiaste tu forma de vestir? -me miró muy desepcionado-

- Pues si... La verdad si, pero... ¿Qué más da? Vestirme así también me gusta -rei-

- Nooooo, no está bien por culpa de ese tal "Juan" no pude ver y pude conocer tu lado tierno... Tu "Yo" de antes -cruzo los brazos indignado-

- Bien... ¿Me quieres ver cómo era antes? -lo mire y reí-

- Este... Siiii, por obviedad -rio-

- Bien entonces mañana me verás así y actuaré como mi "Yo de antes" mañana, ¿Te parece? -rei y estire mi mano-

- Me parece perfecto -rio y estrecho mi mano-

- Bien entonces ahora vengo, te veré a la hora de la salida para ir a mi casa y para que me ayudes con el plan -sonreí mientras caminaba-

- Está bien te veré en la puerta -me gritó y fui a la oficina del director-

Le pedí permiso de salir por un par de horas y accedió sin pedir razón alguna, yo creo que me lo está compensando por no haber cambiado a Juan de salón, fui y me compré un par de vestidos, uno rosa claro liso y otro igual de color rosa pero más intenso, un par de zapatos bajos color negro, una diadema color rosa y un bolso color negro. Lo pague, fui a casa y lo deje, cuando hice todo esto, me mire al espejo... No podía creer que después de todo esté tiempo me vuelva a vestir y a comportar como antes, pero una promesa a un amigo no se rompe, salí de mi casa y me fui a la escuela otra vez y llegué justo a tiempo para la clase de Biología.

Sonó el timbre de la hora de la salida, agarre mis cosas lo más rápido que pude pero otra vez me detuvo Juan.

- ¿Qué quieres ahora Juan? -rodee los ojos-

- Perdón si te molesta mi presencia aquí, solo te quería dar las gracias por haberme prestado tus cuadernos, prometo que mañana te los daré y no te molestaré -se fue como perro... Con la cola entre las patas y eso me hizo sentir mal-

Lo detuve- Perdón si te trato así... Es que no se me olvida como me trataste y lo que me hiciste no te guardo rencor como te lo dije antes de que viniera, pero te veo y me duele lo que me hiciste, jamás pensé que llegarás hasta ese extremo, ¿Te acuerdas cuando me dijiste que ojalá encontrará a alguien me me amara? -sonreí-

- Si, si lo recuerdo, recuerdo muy bien todo lo que te dije, como te lo dije y como te trate y te pido perdón otra vez por todo lo que pasaste conmigo- agachó la cabeza pero se la levanté-

- Te perdono y esa persona que ahora me cuida y me ama... Se llama Cole -en ese momento y llegó, paso y me abrazo- Le estoy diciendo que ahora eres tú la perona que me ama incondicionalmente y que jamás me hará daño, ¿Verdad? -lo mire y sonreí-

- Así es, ese soy yo, yo prometo amarla hasta el fin de mis días y hola otra vez soy Cole y ya se quién eres y la historia con mi novia-

Estuvieron hablando por un par de minutos, nos despedimos y nos fuimos.

- Woow no esperaba eso -dijo Cole mientras me abrazaba-

- Ni yo -rei- Mira ahí está David... Espero que no te moleste que lo halla invitado a la seción de fotos -rei nerviosa-

- No te preocupes todo sea porque te quedes con tu mamá- llegamos con David, hablamos y después fuimos a casa donde ha estaba mi mamá ahí-

Comimos algo, nos pusimos de acuerdo, Cole me había comprado unos vestidos y me vestí como antes.

- Demonios... Pero tenemos un acuerdo eh T/N... -me apunto con un dedo y reí-

- Si y no pienso romper ese acuerdo David -rei y lo apunte con el dedo haciendo burla-

Nos tomamos unas cuantas fotos, las vimos, repetimos, las volvimos a ver y nos tomamos más, después unas de los 4, mamá, Cole, David y yo.

Cuando vimos que todo había salido bien comimos algo, cuando se hizo más noche nos despedimos, David se despidió y se fue, Cole hizo lo mismo, me deseo suerte y me prometió que estaría ahí en el juicio y mi mamá y yo nos fuimos a dormir.

El fruto prohibidoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora