夏 "Sunny Side Up" 夏// → (✧volkabo✧)

☀️;; 04 yolk.

Narra Volkov

Hoy había otra reunión con el FBI, por lo que ya estaba nervioso de antemano, últimamente no prestaba atención a ninguna de estas y podría ser un inconveniente.

Por otra parte estaba aliviado, al parecer Gustabo no se dió cuenta de que yo era el emisor de la nota, si no, probablemente me lo hubieran encarado y eso me incitaba a volver a mandar otra, si es que no me había confundido de taquilla, claro.

Ahora mismo me encontraba esperando a que llegara la hora de la reunión mientras patrullaba tranquilamente por Los Santos.

Narra Gustabo

Horacio y yo escuchábamos canciones de la radio mientras esperábamos que alguna alerta saltase, el día estaba muy aburrido.

Finalmente, después de unas cuantas canciones cantadas a todo pulmón, una alerta llegó y marcaba menos de 1km.

'Hay un hombre en grove street avenue totalmente desbocado y violento fuera de mi casa, ¡tengo miedo!'

-Marcatela, Gusnabo.- Me dijo Horacio bajando el volumen de la radio mientras llegábamos a la calle, estaba en los barrios malos de la ciudad.

Antes de llegar al sitio concreto ya se escuchaban gritos desgarradores por parte de un solo sujeto y se veía a gente andar muy rápido fuera de la zona.

Aparcamos cerca del hombre y bajamos del vehículo tratando de transmitir paz y tranquilidad para que el señor no se alterase más. En cuanto nos vió bajar del coche de incógnito, estrelló su cabeza contra un muro cercano mientras lloraba y gritaba demasiado escandalosamente.

Narrador externo

Haciendo que ambos agentes se mirasen entre sí, preocupados, al no tener mucha idea de como proceder, no sabían si el sujeto estaba armado o no, pero no querían sacar sus armas reglamentarias para que no se tensase más.

-Hey, amigo ¿Estás bien?- preguntó Horacio sereno. -¿Te podemos ayudar en algo?-

El sujeto giró la cabeza con lágrimas en los ojos.

-Lo que me faltaba, que llegase la policía.- su voz se quebró totalmente y volvió a sollozar. -NO ME PODÉIS QUITAR NADA, YA LO PERDÍ TODO.- chilló y empujó un triciclo que había al lado con el pié.

-No sabemos que te ha pasado, pero seguro que lo podemos hablar, no lo has perdido todo.- Dijo esta vez Gustabo.

-¿Cómo estás tan seguro?- el hombre apretaba sus puños con fuerza y respiraba fuertemente.

-Pues...- Gustabo recordó su tiempo solo en el hospital psiquiátrico, la soledad y la confusión, como nadie iba a visitarle ni siquiera en su cumpleaños, como no le llegaba ni una llamada. -...yo también lo perdí todo, pero, en realidad, nunca se fue y volvió mejor que nunca.- dijo mirando a Horacio de reojo.

El chico daba vueltas en círculos suspirando hasta que pasó un niño que salía inocentemente de su casa, que al interponerse entre el señor, este le propinó un golpe por la frustración y las ganas de desahogarse.

Horacio actuó rápidamente sacando el taser y dándole al sujeto mientras hacía un ademán a Gustabo de que lo esposase rápidamente mientras el taser se recargaba de vuelta.

Gustabo fue a esposarlo pero el hombre ignoró los efectos del disparo con taser y sacó rápidamente una navaja de su bolsillo, intentando apuñalar a Gustabo, que lo pudo esquivar a la perfección al estar el hombre de espaldas y no poder calcular bien.

El taser de Horacio se trabó, no estaba funcionando y sus manos temblaban viendo como su vida y la de su Gustabo estaban en peligro.
Si el hombre sacaba una pistola antes que ellos, estarían perdidos ya que la poca cordura del sujeto le invitaba a actuar por impulso y obviamente como Gustabo rompió la distancia de seguridad para esposarlo, estaba peligrosamente cerca del rubio.

Con las manos totalmente sudorosas y mucho terror palpable, Horacio vió como el hombre sacaba una pistola, lo que temía, y al saber que ya no podría hacer nada porque con un solo movimiento en falso, ambos dos estarían con un tiro, mando un 'QRR' y ubicación por el canal de radio donde habían más personas y compartían el FBI con el LSPD y LSSD, en seguida comenzó a escuchar voces dentro de la radio pidiendo detalles, pero siendo apuntado, silenció la radio para no estresarse con tanta gente hablando y levantó las manos mientras veía a Gustabo, quien también estaba con pánico palpable y en el suelo por el esfuerzo realizado al esquivar la puñalada.

Vieron como el hombre reía al sentirse poderoso por tener a dos agentes del FBI bajo su merced.

Pero su risa no duró mucho más, ya que recibió un disparo en el estómago que hizo que cayera al suelo dándose un fuerte golpe en la cabeza contra este y cayendo al lado de donde Gustabo estaba sentado y salpicándolo con su sangre.

Horacio fue corriendo a levantar a Gustabo del suelo y se abrazaron aún aterrorizados al haber presenciado el fin de sus vidas muy cerca.

-¡¿Estáis bien?!- Volkov fue quién disparó al sujeto y se acercó corriendo hacia ambos hermanos para comprobar si tenían algún tipo de herida, se alegró al ver que estaban intactos.

Los demás patrullas que habían acudido al QRR' se encargaron de pedir testimonios a los vecinos de dentro de las casas y de llevar al psicótico hombre al hospital para ser reanimado.

Volkov pidió una grúa para el coche de los agentes de FBI, ya que con la tensión que llevaban encima, sería peligroso que condujeran en ese estado.

Los llevaría directamente a la sede del FBI para que, sobretodo Gustabo, cambiase de uniforme ya que estaba ensangrentado.

En el camino a la sede, Volkov preguntaba a ambos sobre la situación y pedía de todo tipo de detalles, Horacio se recompuso más rápido y poco a poco iba hablando más, superando cada vez más la tensión del momento, pero Gustabo se mantenía en completo y absoluto silencio con la cabeza bajada y pensando en sus cosas.

Cuando llegaron a la sede, Volkov acompañó a Gustabo hacia los vestuarios y sonrió internamente al ver como la pegatina con un sol que le puso al sobre del rubio, estaba pegada en la taquilla de este. No se había equivocado. Le dió un par de palmadas en la espalda al rubio y le revolvió un poco el pelo antes de irse del vestuario para darle privacidad a este para cambiarse de ropa.

Se dirigió hacia donde estaban todos y observó cómo Horacio le contaba a los agentes infiltrados a los otros dos trabajadores del FBI lo que había sucedido, Conway, como era típico de el, se dedicó a insultar y maldecir a ambos para transmitir de forma indirecta su preocupación de que algo pudiese haber sucedido, sabía que no tenían la culpa, pero Conway quería echarles la bronca como mensaje de que tuvieran más cuidado.

Antes de que que comenzase la reunión, Gustabo llegó y Conway al ver como de distraído y desconectado de la realidad se hallaba el rubio, le dijo a ambos hermanos que mejor se retirasen a su hogar a descansar, ya que Conway sospechaba que la situación podría haber provocado algún impacto de alguna forma en la salud mental del rubio, quien tras su recuperación, aún se encontraba sensible con esos sucesos.

Ambos se retiraron a descansar y en cuanto finalizó la reunión, Volkov se escabulló sigilosamente a los vestuarios con la excusa de ir al baño para dejar otra nota en la taquilla de Gustabo.