DEVIL | 태꾹

✧ SEVEN.

❝ Hyung ❞

Hace 9 años.

— Hola.

Jimin y Yoongi miraron a Jungkook como si le hubiese salido otra cabeza. ¿Por qué estaba ahí frente a ellos? Lo más sorprendente eran aquellas grandes ojeras y su descuidada apariencia.

— ¿Qué quieres? — preguntó Jimin con brusquedad, no queriendo que el chico le diera lástima por su deplorable apariencia.

Yoongi acarició suavemente la palma de su mano, tratando de que se tranquilizara, después de todo seguían en la escuela y no podían causar una vergonzosa escena en el lugar.

— Solo quiero disculparme por lo que hice. Estuvo demasiado mal, pero yo... — Jungkook dejó de hablar cuando se dió cuenta que su voz estaba a punto de quebrarse. — Nada, solo eso.

A Jimin no le convencía aquella disculpa, sabía que probablemente sus palabras eran sinceras y Jungkook en serio estaba avergonzado de sus acciones, pero presentía que el menor guardaba un secreto, algo que tenía que ver con lo que les hizo. Soltó la mano de Yoongi y se levantó de su asiento, acercándose a pasos lentos a Jungkook, quien miraba el suelo como si fuese lo más interesante en ese momento.

— ¿Por qué, Jungkook? ¿Por qué te gusta jugar con las personas?

Yoongi también quería saber la razón, conocía a Jungkook desde hace algún tiempo, pero él nunca le mencionó algo acerca de su pasado o por qué tenía ese comportamiento.

— No...

La voz de Jungkook era débil, casi inaudible. Ambos se sentían demasiado confundidos, nunca habían visto a Jungkook actuar de esa manera, lucía tan triste y como si estuviesen apagado.

— ¿No, qué? — preguntó Jimin, cruzándose de brazos.

Jungkook comenzó a sollozar, arañando sin parar sus brazos y manos, sus ojos ahora habían perdido cualquier brillo que aún tuviera y sus labios eran mordidos sin alguna delicadeza. Su respiración era rápida y su cuerpo temblaba sin parar, como si estuviese teniendo un ataque.

El menor sentía como si lo estuviesen encerrando en una burbuja sin aire, y no solo eso, sentía demasiado miedo y creía que en cualquier momento caería al suelo por el mareo.

— ¿Jungkook? — Jimin trató de tocarlo, pero su mano fue tomada por la de Yoongi, impidiéndole cualquier momento.

Yoongi negó con la cabeza, diciéndole a Jimin que dejara a Jungkook. A pesar de que este quería negarse, terminó aceptando ya que no le sería de mucha ayuda al menor, no sabía qué hacer en ese tipo de situaciones.

— Cariño... ¿Puedo abrazarte? — Jungkook, a pesar de estar en esa condición fue capaz de reconocer la voz tranquila de Yoongi, y se limitó a asentir con la cabeza. — Todo estará bien, lindo. Escucha mi corazón, concéntrate en mi respiración.

Jungkook temblaba en los brazos de Yoongi, tratando de escuchar los lentos y calmados latidos de su corazón, concentrándose en respirar al mismo tiempo que le marcaba Yoongi. Trataba de escuchar las palabras de aliento del mayor, quien acariciaba en círculos su espalda.