✧ ELEVEN.

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Cambio





Taehyung miró como Bogum se alejaba cada vez más hasta perderse de su vista. Seguía sin comprender a qué se refería Bogum, tampoco entendía la conversación que él y su hermano tuvieron hace unos momentos, aunque bueno, más que una conversación parecía una Gerra de indirectas.

Se recargó en el marco de la puerta y arrugó su frente mientras trataba de pensar con claridad, en busca de una respuesta. Pero no la encontró, no sabía nada y hasta ahora se daba cuenta de ello.

Jungkook era su hermano pero ni siquiera lo conocía bien como se esperaba.

Incluso Jimin y Bogum lo conocían más que él, ¿A caso era una jodida broma o qué?

Hace nueve años, Taehyung comenzaba a sospechar debido a la conversación que tuvo Yoongi con Jungkook. Fue cuando iban a tener su primera cita, él salía para ir a buscar a Jungkook y poder irse a dónde tenía planeado, pero no pudo evitar escuchar la conversación que su hermano tuvo con Yoongi.

Estaba demasiado cegado por su amor que, a pesar de que sospechó, no dijo nada. No quería que todo su teatro se viniera abajo.

Pero cuando Jimin le contó que Jungkook lastimaba y se burlaba de las personas con las que se acostaba, no pudo evitar preguntarse si él en serio lo amaba.
Jungkook nunca fue el chico inocente que él creía, se acostaba con muchas personas por diversión y aquello le dolió, demasiado.

¿Él era otro de sus jodidos pasatiempos?

Jimin tenía razón. No sabía ni una mierda de Jungkook.

Y eso era lo mejor. No podía involucrarse más con Jungkook, no cuando estaba a punto de casarse.

Toda su confusión era algo que debía olvidar, o pronto él volvería a salir lastimado.

— ¿Hyung? — Jungkook le miró en cuanto entró a la sala. Pero Taehyung no dijo ninguna respuesta. — ¿Deberíamos comenzar a trabajar en la letra?

— Ya tenías una, utilicemos esa y terminemos con esta mierda de una vez. 

Jungkook se sorprendió ante las palabras duras del mayor, pero trató de no mostrar lo mucho que le afectaron y dolieron. Se estaba esforzando en mantener una buena relación, pero Taehyung simplemente era el que se esforzaba en crear un muro alto que él claramente no era capaz de romper.

Relamió sus labios con nerviosismo y tragó duro, bajó la cabeza y miró sus pies. ¿Qué le sucedía? ¿Eso era todo?

¿Iba a dejar que todo terminara así y ya?

No negaba que en un principio el plan era entregar la canción a quien quiera que iba a cantarla. Pero después de ver a Taehyung parado frente a él, no pudo evitar... Mandar todos sus planeas al carajo.

Fue como si mentalmente tirara la canción al bote de basura, le escupiera y por último quemara el bote de basura. No quería ver esa canción jamás.

Iba a crear una nueva y sería mejor porque... Tendría la ayuda del protagonista del drama.

— No me gusta. Ayúdame a crear otra. — se encogió de hombros, restándole importancia al asunto.

Taehyung no podía creer que Jungkook estuviera hablando jodidamente en serio. Se veía tan despreocupado mientras bebía de su taza de café y le miraba con unos ojos tan inexpresivos.

¿Cómo era que posible que desechara una canción como si nada? Jungkook había perdido por completo la cabeza.

— ¿Qué mierda, Jungkook? Solamente dame la jodida canción para que me aprenda la letra y ya. — Taehyung se acercó a Jungkook, estaba comenzando a enojarse con el menor.

DEVIL | 태꾹Donde viven las historias. Descúbrelo ahora