Capítulo 5. 🥀

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Ding-Dong

¡El maldito timbre!

Él se separó de mí, con una fuerte mordida en mi labio y gruñendo furioso.

-Maldición, ¿que no puedo tener sexo con mi esposo en mi propia casa? ¿Quién rayos es? -dijo mirando hacia el techo mientras yo me ponía la camisa

-Es lo que trataba de decirte- el me miró sin comprender- mi madre viene a vivir con nosotros

Su cara se volvió de una de enfado, a una de chiste.

-Amor sabes que no serías capaz de traer a tu madre, no me hagas reír.

Ding-Dong

-Está esperando afuera debo abrir- dije mientras iba hacia la puerta, pero él me detuvo agarrándome del brazo

-Dime que es mentira porque juro que...

-¿Qué? ¿Juras qué? no podrás hacerme daño con mi madre aquí no eres tan idiota

-Solo te diré una cosa Jimin, esta noche, no te salvas. Ni tu madre podrá sacarte de entre mis sábanas.-Y dicho esto se fue hacia arriba

Yo me arreglé, y fui hacia la puerta.

-¡Madre!- dije alegre, en verdad lo estaba

-¡Querido! ¿Cómo has estado?

-Muy bien, pasa!! -Pasamos y yo llevé sus maletas para su habitación mientras ella esperaba abajo en la sala

-Cuéntame hijo, ¿cómo te trata la vida?

-Pues....bien. Las clases de baile van muy bien, y en casa también- dije fingiendo una sonrisa

-Jimin esta bien que estuvimos distanciados pero te conozco, dime que ocurre

-Nada madre, con Jungkook estamos un poco distanciados y estuve pensando en irme, pero en serio lo amo y tengo miedo

-Hijo...solo escucha...

-¿A tú corazón? Ya lo hice madre, pero solo me dice que lo deje....pero cuando lo veo, solo logra agitarse y morirse de amor. El está muy frío y seco últimamente  me duele, me duele muchísimo. Tengo muchas ganas de besarlo y abrazarlo pero el me evita y me empuja como lo hace habitualmente

-No sé qué decirte, solo que te apoyo en todo.

-Gracias madre, me alegra que estés aquí.-Nos abrazamos, y fuimos a tomar el té.

Jungkook no apareció en toda la tarde.

Con mi madre hablamos de todo, ella me contó que había conocido a un señor que le agradaba bastante.
Con mi madre comenzamos a hacer la cena, luego de que la cena estuviese pronta, subí a llamar a Kook.

Golpeé la puerta una, dos, tres veces cuando me asusté y entré.
Él solo estaba sentado en un sillón, con la cabeza entre las manos.

-¿Jeon? La cena está pronta y..

-No quiero cenar.- dijo frío

-Jeon sé que no te cae bien mí mamá pero por lo menos ve a saludarla...no seas mal educado....

-¡Te dije que no quiero bajar! Acaso no entiendes

-Solo te diré una cosa que no te sorprenda si esta noche no duermo contigo y tampoco si mañana ya no estoy

Dicho esto me fui hacia abajo junto a mi madre conteniendo las lágrimas llorando en silenció  y muriendo por dentro.

Un Marido Golpeador  KOOKMIN Donde viven las historias. Descúbrelo ahora