•Bad Girls•

Nobody Like You

28 horas antes del ataque...

Lia iba a pasos rápido hacia su entrenamiento, hoy despues de mucho tiempo iba a ver al chico de nuevo, algo dentro de ella palpitaba con fuerza al pensar en aquel peculiar pelinegro.

- ¡Espera!

Grito un chico pelimarron de nombre Seungmin. Lia blanqueo los ojos y siguió andando más rápido.

- Lia, ¡hablemos!

- Olvidalo Seungmin, no puedo sentir ya nada, ¡lo siento!

El chico jalo el brazo de la chica hacia el.

- ¡¿Que no entiendes?! Ya no pasa nada entre nosotros Kim, ¡life goes on, amigo!

El chico la atrajo más hacia el, ella forzegeaba por qué la suelte y el chico era cada vez más tosco, en un intento de que ella volviera la sentir algo por el, el chico estampó con brusquedad sus labios a los de ella.

La chica golpeaba el pecho del chico y jalaba su camisa para que la soltaba, parecía que nada lo iba a parar hasta que alguien hablo.

- Lia...

La chica se quedó helada al ver a su escuadrón con el otro escuadrón en frente de ella.

- Lia... ya debemos ir a practicar -menciono incomoda su lider- después si quieres se reconcilian...

La chica mayor se callo al ver que se había metido en terreno minado y que, había dicho algo que no debía de haber dicho, sobre todo frente a cierto pelinegro.

Aquel pelinegro, quien estaba detrás de todo, aturdido del el porque le dolia tanto el pecho al ver a la chica, en esa posición tan... "prometedora" con otra persona.

El hecho de no querer amar a alguien no significa que no vas sentir nunca.

El corazón del chico jugo con fuego y...

Al final, dentro de el, todo su corazón ardió en llamas y quedaron solo cenizas.

Soobin salio corriendo de aquel lugar que lo ponía tan incomodo, de ella que le hacía sentir algo que le costó asimilar y cuando lo hizo, ya era muy tarde para dar marcha atrás.

Soobin corría hasta que siente que alguien le agarra del brazo lo cual lo hace parar.

- Hey

Dijo la pelinegra.

- Yo...

- Eres muy astuta, ¿no Lia-ssi? No, yo fui un estúpido en pensar que podríamos llegar a ser algo más

- De verdad que no es lo que crees, dejame...

- ¿Explicarlo? No tienes porque explicarlo, tu misma lo dijiste, fueron solo unos besos, no paso nada más esa noche, tu no me debes una explicación porque no somos nada como para yo exigir algo

El chico bajo la cabeza y suspiro, pequeñas gotas salian de sus ojos y resbalaban por su cachete.

- ¿Estas llorando? -menciono sosprendida la chica- porque...

- El porque, ¿quieres saber el porque? -menciono mientras que se limpiaba sus lagrimas con rabia y reia amargamente- porque mi corazón se confundió, mi corazón pensó en quererte aún sabiendo que no había oportunidad, y me da mucha rabia que sienta tanta tristeza cuando no paso nada aqui y me da lastima pensar que estoy amando a alguien tan egoísta como tú!

Dicho esto el chico salió -avergonzado- rápidamente de ahí, y la chica se quedó parada viendo por donde se había ido.

Puso sus dos manos en su pecho para votar un gran suspiro.