Sailor Stars: El Resurgir De La Luz

XXIV: Regalo del Cielo

La canción que canta Leila se llama " I Have a Dream, de ABBA", en su versión de piano. (2:17).

El resplandor cesa gradualmente, en las manos siente como recorre la energía pura de aquel instrumento, como una parte de su ser , unidos por un vinculo eterno e inexplicable. Su luz alumbra sus prendas oscuras, el uniforme de una guardiana, sentidas como una segunda capa de piel. Ahi se da cuenta del poder que tiene entre manos, por fin libre y materializado, para poder usarlo en nombre de la justicia.
Se ve las manos, pies, pecho, su insignia dorada... como si recién cayera en cuenta de lo que significa ser una Sailor. Ese nuevo sentimiento viene acompañado de un fuerte recuerdo.

"La Tierra de las Cenizas, donde aparece el Astro de las Sombras cubriendo con su manto negro cada claridad que pueda haberse filtrado...

Había vuelto de la misión sin las manos vacías, el tesoro era tan precioso y apreciado para mí, que no iba a compartirlo con nadie!. Después de todo, me lo habia ganado, era mi responsabilidad encontrarte... era... mi...

Debo ocultarte antes de que alguien te vea y te aparte de mi! En este mundo, no se permiten las joyas como tú. Solo las veía de lejos, como un lobo hambriento ve a su presa y la desea. Ahora que estás en mis manos, jamás te dejaré ir ...

Qué?... Que quieres salir al mundo dices?. No, eres mía.

Nadie puede saber de tí, imagina que otro sienta este poder inmenso en la palma de sus manos. Me gusta mirarte... admirar tu belleza, tu simpleza, tu claridad infinita....

Qué pasaría si eres mi secreto? Tengo derecho de poseerte y ser quién tenga el valor de portarte.

Si? Te gusta la idea? Espero que sí, eres todo lo que habia soñado... cuando te miro, veo mi blanco futuro, una nueva visión, un inicio...

Cuál es el precio a pagar para mantenerte a mi lado?....

Mi alma?."

Una alarmante sensación de advertencia se me presenta en su interior, dejando de lado este maravilloso momento. Esa intuición que le saca de sus memorias, dice que se acerca el peligro, algo había desatado. La aparición del arma, desencadenó el poder sellado dentro de ella, al sentir su estrella palpitando, resonando conscientemente.

La Lira esta reflejando su luz...

Eso que debía ocultar.

Unos pasos que se oyen descender por la escalera, se detienen en la puerta, antes de abrirla con fuerza. Incluso antes de verles, ya sabía de quiénes se trataba. Ambas se dirigen hacia donde está, completamente determinadas.

Myra:- Debemos irnos - Tomada por sus manos, vuele a sentir la sensibilidad en sus moretones. Pero a la presurosa chica no parece importarle esa molestia, sino que le preocupa otra cosa, dado su severo tono de voz.

-Vienen por mí, verdad?-

Se enlazan las miradas, su compañera frunce el ceño, le ha dado la impresión de estar hablando con otra persona, y puede que sea cierto. Se acercaba cada vez más al pasado, y puede que al abrir esa cerradura, que guarda su más importante secreto en un lugar negro de su memoria, en algún punto, también le otorgue otro futuro distinto al que se podría haber imaginado.

Misaki:- Al menos ya no estás tan indefensa...- Mira la Lira con admiración.

-Shh... - Hace el gesto para que se callen, porque presiente a alguien más. Inmediatamente la luz la cubre para regresar a la forma civil.

Tras oir otros pasos precipitarse, la puerta abierta revela a Michiru Kaio. Se sorprende al encontrarse a las tres, pero sonríe al verla.

Michiru:- Eres talentosa Leila... un don innato para comprender la lectura tecnica y para darle vida a lo escrito en papel a través de un instrumento. No podría dejar que un artista silencie esa pasión, esa luz que lo caracteriza y lo hace ser quien es...- Ambas se toman de las manos. Michiru también lo hizo espectacular. Inesperadamente, puede percibir sus intenciones, a través de sus ojos, de una forma de la que no era capaz antes.