𝒗𝒆𝒊𝒏𝒕𝒊𝒏𝒖𝒆𝒗𝒆

1.7K 108 8
                                    

Shark

Esto parecía un jodido chiste. Toda la situación era un puto chiste.

Nos habían obligado a hacer una fiesta, más precisamente, una fiesta de disfraces. Yo estaba vestido de tiburón, sintiéndome completamente ridículo, mientras que Sydney estaba vestida de Ariel, también conocida como la Sirenita.

La gatita apenas podía caminar con la cola de sirena que estaba envuelta en sus piernas, pero lucía jodidamente sensual, por otra parte, yo casi no podía respirar con la máscara de tiburón que estaba sobre mi cara.

Mi cerebro trabajaba a toda velocidad, tratando de entender por qué mierda esto era relevante para el plan de mis enemigos, además de que no dejaba de estar alerta en ningún momento.

En esa fiesta pasaría algo malo, eso estaba asegurado.

Mis hombres estaban revisando todo, cada invitado, cada puerta, cada rincón, todo tenía que estar bajo control para que nadie terminara muerto.

O, mejor dicho, para que ninguna persona perteneciente a mi mafia terminara muerta. El resto se podía morir tranquilamente.

—Si alguien, hace un par de meses, me hubiese dicho que vería a un mafioso con un disfraz de tiburón, no le habría creído— dijo su dulce pero mordaz voz.

—Cierra la puta boca. Estoy tan malhumorado que podría rifar un jodido disparo en la rodilla, y tú seguro te lo ganarías.

—Oh, ¡vamos! Agreguémosle un poco de humor a todo esto; no me molestaría que mi última imagen antes de morir fuera tu cuerpo en este precioso disfraz— siguió molestándome, meneando su peluca pelirroja.

Si las sirenas fuesen reales, Sydney perfectamente podría ser una de ellas, tan malvada y seductora.

—Tengo que verificar que todo esté en orden. No te separes del hombre que asigné para cuidarte— le exigí, retirándome.

Sólo con su olor me cautivaba, llevándome a otro mundo, y yo en ese momento necesitaba estar enfocado en este mundo.

Las personas que habíamos invitado parecían estar pasándola bien, pero sinceramente me importaba una mierda, sólo las observaba para detectar si había alguien sospechoso entre ellas. Sabía que el jodido viejo que me traicionó no aparecería, era demasiado inteligente para entregarse con tanta facilidad.

Por otra parte, Steve tampoco había aparecido, lo cual me alegraba. No necesitaba otra de sus escenas, aunque podía admitir que me había dolido ver la desilusión en su mirada.

Algunas horas habían transcurrido, y mi malhumor seguía más presente que nunca. Estaba dispuesto a romperle las piernas a la primera persona que me molestara, sin embargo, alguien en la calle frente a la mansión me distrajo.

Sydney, vestida de pirata.

—¿Qué carajo? ¿Por qué te cambiaste de disfraz? No es lo que nos dijeron que hiciéramos, joder— me acerqué a ella para enfrentarla, confundido y alterado.

—¿Desde cuándo eres tan obediente? Tranquilo, todo estará bien— murmuró levemente, desviando su mirada de la mía, y logrando que le prestara atención al parche en su ojo. ¿Qué carajo estaba planeando?— Toma, para que te relajes.

Me ofreció una copa con algo que parecía Vodka, y la tomé, extrañado. Ella ya sabía que no me agradaba esa bebida, pero estaba tan abrumado que un sorbo no me haría mal.

Grave error.

Mi visión se tornó borrosa, y por eso no logré identificar si la mueca en la cara de Sydney era una sonrisa o no. Todo empezó a pasar más lento, la música que provenía de la mansión sonaba tan lejana, y mi cuerpo se sentía preparado para dormir.

Y eso hice, jodidamente me desmayé. Sydney me había drogado.

⛓ ⛓

Desperté mareado, recordando cada segundo de lo que había pasado antes de mi desmayo. Quería matar a alguien. Mejor dicho, quería matar a la mujer que estaba sentada frente a mí, mirándome fijamente.

—¡Hija de puta! ¿¡Qué mierda crees que estás haciendo!?— grité, tratando de levantarme a golpear su rostro, que antes me parecía tan angelical y ahora sólo me causaba repulsión. Sin embargo, estaba atado a una silla. Me había secuestrado y además debilitado— ¡Te voy a asesinar! ¿¡Me escuchaste, perra estúpida!? ¡Te despedazaré! ¡Yo confié en ti!

Y luego de decir eso, las luces se apagaron. No veía absolutamente nada, pero todo empeoró cuando el ruido de varios disparos se hizo presente. No tenía ni una puta gota de miedo en mi cuerpo, sólo deseaba torturar y ver sangre; lo que me pasara a mí ya no sería importante cuando tuviera la cabeza de Sydney separada de su cuerpo, joder.

O eso estaba pensando, hasta que los disparos se detuvieron y las luces se prendieron, permitiéndome ver a una mujer idéntica a Sydney parada frente a mí, e irónicamente, también parada frente a la propia Sydney.

¿Qué era toda esta mierda?

—Esto fue más divertido de lo que pensé— habló Sydney, o mejor dicho, la copia de Sydney. Era la mujer en el disfraz de pirata que me había drogado, estaba sosteniendo un arma entre sus manos, jugando con ella. Mientras tanto, me di cuenta de un detalle que antes no había observado: la gatita seguía en su disfraz de Sirenita— Una hermana gemela, ¿eh? Apuesto a que ninguno se esperaba eso.

—¿Qué le hiciste?— pregunté consternado, moviéndome desesperadamente para soltarme de las cuerdas, pero fue en vano.

—¿Y a ti que te parece, bombón de dulce de leche?— se burló, aproximándose a mí y acariciando mi cara con el arma— ¿Crees que soy capaz de matar a mi propia hermana?

—No te conozco pero dime tú, loca desquiciada— traté de insultarla, furioso, pero solamente conseguí que se riera. No podía apartar mis ojos del cuerpo tieso de mi compañera de crimen, que me observaba como si estuviera muerta.

—Quien diría que esta perrita lograría sacar a flote tu debilidad, ¿no? Pero no desesperes, todavía no está muerta. Simplemente le dimos una droga que deja inmóvil a las personas, apenas puede pestañear, pobrecita. Íbamos a darte la misma droga a ti, pero eso hubiera sido muy fácil, y nos perderíamos la diversión que va a venir... justo ahora.

Luego de que dijo eso, aparecieron cinco hombres, dos se encargaron de llevar a Sydney, la cual parecía una estatua, y tres me agarraron a mí, arrastrándome aunque estuviera atado a la silla.

Joder.

⛓ ⛓

chan chaNnn ustedes se esperaban que sydney tuviera una hermana gemela? durante la novela traté de hacerlo lo menos obvio posible así quedaba como un factor sorpresa pero creo que no me salió muy bien JAJSJJS en fin, les gustó el capítulo?

S H A R KDonde viven las historias. Descúbrelo ahora