Capítulo 43

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A– ¿Eres la cobra? – dije levantando la voz, y Bia me tomo del brazo

–Es que...

A– No te lo puedo creer – dije mientras volteaba hacia otro lado

P– ¿Nos quieres explicar?

–Estoy muy arrepentida, de verdad – dijo mientras se limpiaba las lágrimas –Al principio todo comenzó como un juego, solo subía lo que veía, hasta que Marcos me descubrió, yo ya no quería hacer esos vídeos pero él me tenía entre la espada y la pared, me dijo que si lo dejaba le iba a contar a todo el mundo que era la cobra y todos me iban a odiar, pero ahora quiero hacer las cosas bien, ya no quiero ser la marioneta de Marcos

A– Hiciste mucho daño Ailen, y no solo a mi, no puede ser que hayas sido capaz de todo eso

–Estoy arrepentida, ¿Cuántas veces tengo que pedir perdón?

A– No es suficiente con pedir perdón – dije y en eso Celeste entró

C– Llegue en mal momento... – dijo mientras veía a Ailen quien seguia llorando

A– No, ven – le dije y la tome del brazo, todos se quedaron mirando a Ailen

–Solo quería decirles eso, espero que me puedan perdonar – dijo Ailen y se fue

C– ¿Qué pasó? – dijo Celeste al ver la cara de todos

B– Amiga, Ailen es la cobra

C– ¿Qué? ¿Cómo que la cobra?

T– ¿La pensas perdonar? – me dijo Thiago poniendo su mano en mi hombro, tome su mano y todos me miraban

A– Creo que si

B– ¿Qué? ¿Cómo vas a perdonar a alguien así Helena?

A– Se ve muy arrepentida, y creo que en verdad quiere cambiar, merece una segunda oportunidad

B– La gente así no cambia

A– Bia, todos merecemos una segunda oportunidad, ustedes me dieron una cuando les mentí con lo de laix

B– Pero eso es diferente

L– Ana tiene razón, creo que deberíamos darle el beneficio de la duda

B– ¿Y todos piensan así? – dijo Bia y todos asintieron con la cabeza – No lo puedo creer... Después de todo lo que la cobra hizo ¿La van a perdonar así nada más?

C– Bia, no es como que vallamos a confiar cien porciento en ella y que valla a ser nuestra amiga cercana, pero hay que darle la oportunidad – dijo Celeste y Bia torció los ojos

B– Es que no me parece – en cuanto Bia dijo eso, Chiara, Celeste, Pietro, Luan y ella comenzaron a discutir, todos hablaban al mismo tiempo y no se podia entender lo que decían, además de que estaban casi gritando, me estaba dando mucha risa la manera en la que discutían, Thiago y yo nos miramos y reímos,  en eso mi celular comenzó a sonar, era un número desconocido y en medio de todo ese caos decidí contestar, les dije a todos que bajarán la voz pero nadie me puso atención

A– ¿Alô?... – dije mientras ponía mi celular en una oreja y tapaba la otra con mi mano para poder escuchar

–¿Helena?

Voltee a ver a Thiago, nadie me llama Helena excepto Bia, y me pareció bastante extraño –¿Quién es? – Thiago se acercó mientras me miraba confundido

–Soy... Mariano... Soy tu papá – una sonrisa salió de mi cara, tome la mano de Thiago mientras lo miraba –Me gustaría verte

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