𝐋𝐎𝐕𝐄 𝐀𝐆𝐀𝐈𝐍, Paul Lahote

008

ACCALIA MIRA LA LLUVIA caer suspirando y guardando unos útiles que le habían comprado su padre y sus hermanos para cuando entrara a la escuela de la reserva; solo faltaba tres días para ir hacer el examen de ingreso y estaba nerviosa, ya que le habían dicho que ese examen no solo le permitiría entrar si no que la aceptarían en el último año que debía cursar por su edad.

El olor de su manada se hace presente a pesar de la lluvia, por lo que baja las escaleras rápidamente y agradece que nadie estuviese en la sala; se le hizo fácil salir sin tener que mentir sobre su paradero. Cuando ve a los chicos y sonríe para saludarlos con un beso en la mejilla, su mirada se posó en la de Paul que la mirada de manera sugerente a la forma en como lo saludó, pero ella niega y se dispone a caminar con el resto hacia la casa de Jacob. Desde que se transformó, ellos se han dispuesto ayudar al moreno en todo y una de ellas era la lucha, tenían que prepararse por si llegasen enemigos a alterar la paz del pueblo.

—Supe que irás a la escuela de la reserva—habla Jared, a lo que la única mujer asiente con una leve sonrisa. — ¿Estás lista para el examen?

—Sí, pero estoy nerviosa por eso, ¿y si no logro pasarlo? Harry me dijo que seria muy difícil colocarme en otra escuela—expresa con una leve mueca, Paul solo le sostiene la mano fuerte. —Y realmente no quiero ir a otra.

—Tranquila, Lia, podrás ingresar—habla esta vez Embry con una sonrisa amable.

—Es verdad eres muy inteligente Accalia, —todos miran al alfa— ...es decir, si estos tontos lograron entrar y permanecer, lo tuyo será pan comido.

Sam y Accalia ríen ante los quejidos ofendidos de los aludidos. —Tienes razón, Sam, gracias. —eso había logrado, de alguna manera, calmar sus nervios y agradecía tener a la manada de familia; aunque algunas noches volvía a tener la misma pesadilla y eso la desgastaba mentalmente, no tenía idea de que era eso pero le frustraba no saber que significaba. 

Solo podía dormir cuando sabía que Paul estaba cerca suyo.

Paul.

Aún no entendía por que sentía una fuerte atracción hacia él, no sabía por qué le preocupaba o simplemente por qué él calmaba todo su ser cuando entraba en momentos de crisis. Ella lo veía como un ancla a la tierra y que estando él a su lado podría hacer lo que quisiera, ser ella misma.

Inconscientemente lleva su mirada hacia Paul, detallando nuevamente su rostro a lo que su corazón empezó a latir más rápido; el joven solo gira su mirada hacia ella al notar que estaba muy callada, encontrándose con los ojos brillantes de su chica por lo que solo le sonríe al verla embobada mirándolo.

Y es que eso le pasaba a él también cada vez que la miraba.

—Paren, hasta aquí se sienten sus hormonas alborotadas—se queja Embry con una mueca, el resto solo ríe dejando de caminar al ver que habían llegado a su destino. No se sorprendieron de ver a Bella y a Jacob, a excepción de Accalia, que se encontraba escuchando atentamente la conversación del par; el rostro y el olor de la chica le eran familiar.

—No sé que espera Jacob—murmura Jared un poco contrariado con la obsesiva relación que tenía con Bella. —Me agradan, pero...

—Lo de ellos no puede ser. —ante lo dicho por Sam, se quedan callados. — ¡Jacob!

El mencionado se gira a verlos para luego volver a la conversación para terminar de hablar con ella e irse con la manada. — ¿Por qué no puede ser lo de ellos?

—Ella sale con un vampiro—explica Paul, soltando un suspiro sin dejar de mirar al par. Aunque no lo admitiera, él se preocupaba por Jacob. —Él solo se lastima estando con ella.