Sincero [Extra 3]

2K 314 231
                                    

Xiao Zhan estaba por tomar un vuelo de regreso a casa, cuando de pronto, unos largos y gruesos dedos le cubrieron los ojos.

—Si adivinas quién soy, te daré un premio —susurró una voz juvenil y masculina.

Xiao Zhan, con los ojos cubiertos, supo enseguida de quién se trataba. Sonrió.

—Si no me dejas dar la vuelta para abrazarte, le diré a tu papá Yibo que estás en Londres.

—¡Ay, pá! —se quejó Mao Kuan, soltando a su papá y permitiendo que él girara en su dirección.

—Mi niño —Xiao Zhan envolvió en sus brazos a Mao Kuan, quién en ese momento, ya medía lo mismo que él —¿de gira? —le preguntó.

—En realidad no. La gira está en Amsterdam, yo me he escapado unos días antes de que comience. Mi vuelo sale en tres horas.

—Qué coincidencia. El mío sale en dos. Tenemos tiempo para hablar. ¿Has comido algo?

Padre e hijo cogieron sus maletas y buscaron un restaurante donde sentarse a comer y platicar. En ese ratito juntos, hablaron de lo que había sucedido en las últimas semanas, o mejor dicho, lo que le había sucedido a Maomao.

—Cielo, no llores —dijo Zhan con ternura y limpiando las mejillas de su hijo mayor —sé lo doloroso que es, pero mira, eres un chico fuerte. Sabrás superarlo.

—Pero Darren... Sí me había enamorado de él.

—Lo sé. Lo supe cuando finalmente lo presentaste como tu novio la segunda vez que le trajiste a casa. Pero amor, no todas las relaciones son eternas. Mírate, tienes sólo veinticuatro años... El amor te llegará algún día.

—Tal vez sí debí quedarme con Liang Jia Xia.

Xiao Zhan se movió esta vez de su lugar y se acercó más a Mao Kuan, a quien abrazó.

—No porque Liang Jia Xia fue tu novia y relación más larga significa que te ibas a casar con ella. Igual no porque te hayas vuelto a enamorar significa que sería el hombre de tu vida. A veces tienes que pasar por varias relaciones para dar con el o la indicada.

—¿Como papá y tú?

Xiao Zhan sonrió.

—Tu papá y yo somos un cuento largo y difícil de leer. Pero sí, tu papi y yo no esperábamos volver a estar juntos y míranos, más de veinte años unidos por ti, por Gebie y por Xue Hua.

Mao Kuan sonrió.

—No por un chico perderás las ganas de volver a enamorarte, ¿o sí? —Mao Kuan negó con la cabeza —eso creí.

—Gracias por escucharme, papá.

—Siempre que me necesites, amor, siempre.

Padre e hijo se abrazaron una vez más antes de terminar con sus alimentos. No sé detuvieron en hablar sólo de amor, también, Maomao le contó a Zhan sobre la gira de arte en la que estaba participando, los países a los que viajaría y lo que haría cuando ésta terminara.

—¿Y regresarás a casa? —preguntó con cuidado Xiao Zhan.

—Probablemente sí, si mis padres aceptan que vuelva a vivir con ellos.

—¿Estás de broma? Yibo brincará de felicidad y te atará al árbol para que no te vuelvas a ir —dijo Zhan, muy alegre.

—Entonces... Ahí estaré en unos meses. Eh, pá, pero que sea sorpresa para mí papi Yibo, ¿Sí?

—De acuerdo.

Con esa nueva felicidad, ambos terminaron su almuerzo y muy pronto cada uno se dirigió a su lugar de abordaje.

Sonrisa Sincera | YiZhan [MPreg]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora