Capítulo 44

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Aiden

Fue un día bastante gris y frío, jamás pensamos darle el adiós  a un amigo y más que él estaba joven, las vueltas de la vida son inesperadas, nunca sabes cuando te marchas de esta vida para reencarnar en otra.

Todos comenzamos a circular. Veo de reojo a los padres de David, ellos no han llorado, es muy  raro, es su hijo mayor y estaban neutral.

Mili y Danis salieron primero ya que, Danis se  puso mal, ella en verdad  la estaba pasando mal y Geremias, él solo lloro en silencio, era su hermano mayor y creo que debe estarse lamentando por qué no  contó con su ayuda, se que Geremias hubiera hecho todo por salvar la vida de su hermano.

—Aiden, ¿me acompañas? — Marcus se acercó a mí, le quedó mirando.

—¡¿A dónde?!

—A la mansión de mi tía, necesito reunirme con ellos, bueno ellos me pidieron que fuera y que te llevará a ti, tenían que decir algo.

—Mmm ok.

Nos subimos al auto de Hanny, cada vez que venimos a Toronto Hanny es nuestra chófer, me da hasta risa, le  corre demasiado a Marcus aunque el cabrón ha estado juicioso, no volvió a ver ninguna mujer, anda más enamorado que nunca, aunque Hanny decidió quedarse en Toronto

Al llegar a la mansión, todos ingresamos a esta, pero se ve que los padres de David estaban bastantes tensos.

—¿Qué pasa tía? — pregunta Marcus

—Es Danis, ¡mi niña no responde el celular! —tomó mi teléfono y le marcó a Mili.

—Mili, ¡dime que estás con Danis! — después de que Mli y yo nos divorciamos quedamos como mejores amigos, siempre dormíamos en habitación separada, hubo un momento en que intentamos intensificar nuestro matrimonio pero no resultó así que, quedamos como muy buenos amigos.

No porque, ella me dijo que quería estar sola y la deje con la nana.

—Dame un momento —miró a los presentes —Mili es la mejor amiga de Danis y  me dice que ella la dejó en la mansión, que se quedó con la nana y los niños.

—No, nosotros fuimos allá  primero y estaba todo apagado y muy bien cerraron, el portón de la mansión no está tan lejos de la entrada y estaba todo como si se hubiera.

—Ido —terminó de hablar Geremias —Madre acaba de llegar esto, uno de los empleados de mi hermano lo trae por orden de Danis.

—Mili luego hablamos —le cuelgo.

La señora Flor toma el sobre  en sus manos —Este es para usted Aiden.

Los miró con asombro y tomó la carta, vemos que la señora Flor no chisto en revisar su carta y leerla  rápido, cae de rodillas, vemos todo que el señor Ferrero corre y se agacha al lado de ella, Flor llorar a cantaros.

—Se fue, Danis se fue —mi corazón se acelera

Tomó la carta y la leo

*Hola Aiden, creo que al recibir mi carta ya estaré lejos de casa...

Quiero pedirte disculpas por mi falta de sinceridad contigo, lamento haberte llevado en todos mis secretos a tan largo plazo, debí ser sincera desde un principio pero tenía miedo, tenía miedo de volver a perder el control de mi vida... Sabes algo Aiden, volver a verte fue lo mas hermoso que pude vivir, creeme que si no te hubiera  visto mi historia con David sería diferente, aunque así llevará años con él, y  tú aparecieras  me hubieras cambiado la vida, sabes que te amo y siempre te amaré, eres mi primer amor, el primero que estuvo ahí y me entendió, que jamás tuvo miedo estar a mi lado, pero.. Hasta en nuestra relación hubo secretos. Aiden, quiero pedirte perdón, cuando nos vimos en Inglaterra me había emocionado por un instante, pero después no al ver a David y cambié mi pensar. También quería estar con él; cuando te vi con aquella chica me entraron unos celos insoportables, llegué a pensar que no habías cambiado, pero la que no cambió fui yo, sabes Aiden, cuando nos acostamos en el hospital, hasta sigo sin creerlo que hicimos....*

Mala Chica. © ®(+18)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora