CRIMINAL ||| TAEGI ||| YAOI

XXVI

—Yoongi, debo ir, es un asunto urgente.

—Estás diciendo que te quieren hacer daño —digo con seriedad—. No puedes hacerlo, no quiero que te expongas. Quédate, estoy seguro que podrás solucionarlo desde aquí.

—Pequeño, no puedo dejar a mis hombres solos, eso no hace un líder. —Cierra un momento los ojos antes de mirar a mis ojos fijamente—. ¿Cómo se vería que su jefe este huyendo y ellos estén haciendo todo el trabajo? Esos hombres confían en mí.

—Pero...

—Todo estará bien, Yoongi, te lo prometo. He hecho innumerables veces, creeme cuando te digo que estaré bien.

Aparto la mirada al escucharlo decir eso, pues no quiero que vea la infinidad de sentimientos que me recorren. No sé como se maneja ese mundo, pero deno admitir que tiene razón en algo: no puede dejar a sus hombres, ellos no pueden hacer todo el trabajo, pero eso no quiere decir que debo mandarlo directo al matadero. No quiero que le pase nada. Estoy a punto de hablar cuando siento como empieza a besar mi mejilla con insistencia, sus besos empiezan a bajar hasta llegar a mi cuello; inclinó aún más mi cabeza para darle un mejor acceso, un ligero suspiro escapa de mis labios al sentir como sus labios dejan húmedos besos en mi piel. No debería distraerme, pero por dios, en verdad está matandome. Tendría que estar concentrado para poder seguir esta conversación, mas el sabe como distraerme.

—Tan dulce —susurra.

Las vibraciones de su voz provocan un ligero cosquilleo en mi cuerpo y tan solo soy capaz de dejar que juegue con mi piel tanto como desee. Siento como empieza a dejar ligeras mordidas, poco a poco empieza chupar con fuerza mi piel y sin poder evitarlo suelto un jadeo. Mis manos viajan hasta sus hombros y me aferró a él con desesperación. El cosquilleo que había sentido en un principio se vuelve un calor que recorre todo mi cuerpo y se centra en una sola parte de mi cuerpo. Un gemido escapa de mis labios cuando otra mordida se hace presente.

—¡Vante! ¡Es hora de irnos! —Hoseok golpea la puerta—. ¡Jackson está aquí!

Ese grito me hace salir de las sensaciones en las que me mantenía Taehyung y me abrazo más a su cuerpo en un intento de protección. Él deja de jugar con mi cuello y suelta un suspiro de cansancio. Mis mejillas empiezan a tonarse rojas al notar lo que estuve haciendo ¡oh, por Dios! ¡Estuve haciendo esos sonidos enfrente de él! Que vergüenza, que maldita vergüenza; sin embargo, todo ese sentimiento se esfuma al recordar lo que dijo Hoseok: Taehyung debe irse y no hay nada que pueda hacer para evitarlo.

—Maldición. —Taehyung se aleja de mi cuello para poder verme a los ojos—. Pequeño, debo irme.

—Dime que volverás pronto. —Tomo su rostro entre mis manos—. No quiero que te vayas tanto tiempo.

—Intentaré volver en unos días, volveré tan pronto como me sea posible. —Deja un beso en mis labios—. En serio, pequeño, te prometo que todo saldrá bien. Volveré por ti, incluso podrás ir a la universidad, te llevaré a una cita. —Me mira con una sonrisa—. Nos iremos a comprar los dulces que tanto te gustan y saldremos .

—Yo solo quiero que regreses bien. —Suelto un suspiro—. No quiero que te pase nada.

Taehyung se acerca a mi oído y empieza a murnurarme que todo estará bien, me dice que regresara antes de que me de cuenta y que estaremos juntos todo el tiempo. Solo espero que sea real, en verdad que no quiero que le pase nada. Deja un beso más en mis labios y hace que me levante de la cama, él estaba por dejarme aquí, pero prefiero ir a despedirlo a la entrada. Una vez que estamos fuera de la habitación caminamos hacia la salida, ahí está YuJin abrazando con fuerza a Hoseok, alejados de ellos está Jackson, el me sonríe y me saluda. Tan solo le devuelvo la sonrisa antes de girarme a abrazar a Taehyung, escondo mi rostro contra su cuello y cierro los ojos.