VI

2.5K 209 18
                                    

"Lou, espero que hayas podido descansar, he tenido que volver a la comisaría.

XX-XXXX-XX

Rick"

Aún adormilada, Louise releyó la nota hasta perder la cuenta. ¿Cómo le voy a llamar si me robaron el móvil? Dijo en voz alta.

Se incorporó y miró a su alrededor, y sonrió, Rick había dejado la casa decente antes de irse. Es un amor... pensó y a la vez sacó aquel pensamiento de la cabeza. No puedes sentir nada por un hombre casado, se reprimió fuertemente. Suspiró y se dirigió a su dormitorio a cambiarse de ropa, se percató de que aún llevaba la chaqueta del Sheriff y se la acercó a la nariz para respirar su aroma. Qué rarita me estoy volviendo, susurró para ella misma. Se despojó del vestido rasgado y lo puso en la basura, cogió ropa interior limpia y se dirigió a la ducha.

Después de una ducha con agua caliente se cambió a su nuevo atuendo y decidió pasar primero por comisaría para devolverle la chaqueta a Rick y después ir al banco y al centro comercial, después de todo, necesitaba un móvil nuevo.

Cuando llegó a la comisaría tenía la esperanza de encontrarse con Rick, pero ahí no estaba él, sino su compañero Shane. Louise arrugó la nariz al recordar lo que le había dicho su compañero Mark sobre él y la mujer de Rick.

- Hola, ¿en qué puedo ayudarte? - dijo el oficial enseñando una de sus mejores sonrisas.

- Emmm ¿Está el Sheriff Grimes? - preguntó tímidamente.

- Lo siento, cielo, pero no tiene turno hasta mañana - Cielo, se repitió Louise en la cabeza. Shane se levantó de su silla para acercarse frente a ella y recostarse en la mesa de su escritorio. Entonces reparó en la chaqueta que traía entre las manos, al quedarse fijamente mirando, ella reaccionó.

- V-vine ayer a denunciar un robo... - dijo nerviosa - Ri-El Sheriff Grimes me dejó su chaqueta y quería devolvérsela. - la joven consiguió formar una medio sonrisa.

- ¡Ah! Claro, me han hablado de ti ¿Eres la profesora de Carl, no? - ella asintió pensando quién habría hablado de ella, ¿habría sido Rick? - Estamos siguiendo el caso, nos pondremos en contacto cuando hayamos conseguido algún avance. De momento estamos cotejando todas las huellas... bueno, le devolveré la chaqueta a Grimes - dijo quitándosela de las manos, puso una de las suyas sobre la baja espalda de la joven y la acompañó hasta la puerta. - Hasta luego, preciosa. - le guiñó un ojo y se dio la vuelta para volver a entrar en la comisaría. Repulsivo, pensó.

Después de pasar por el banco y cancelar su tarjeta anterior y sacar la nueva, se dirigió al centro comercial y fue directamente a la tienda de electrónica. Tardó en decidirse, pero al final compró un móvil sencillo, con tal de que funcione... pensó.

Una vez en casa, introdujo el duplicado de su tarjeta SIM e introdujo el código de seguridad. Saltaron varios mensajes y los fue leyendo y contestando poco a poco. El primero era de su madre.

Mamá

Mamá: Hola cariño, ¿Cómo estás?

Louise: Bien, ¿y vosotros?

Mamá: Todo bien, te echamos de menos.

Louise: y yo a vosotros.

Louise derramó alguna lágrima, y es que su relación con sus padres no fue la mejor, bueno, sobre todo con su padre. El pasado de la profesora pesaba sobre su espalda y recordar su vida en Bristol era tremendamente doloroso para ella. Cuando se recompuso fue hacia el segundo chat de mensajes.

Mark

Mark: Hey Louise, ¿te apetece salir esta noche?

Louise: Hey, la verdad es que tenía planeado quedarme en casa.

Mark: Oh, vamos, eres joven, salgamos a divertirnos ;)

Louise: Otro día mejor, gracias :)

Mark: :(

La joven profesora suspiró, no quería nada con Mark, pero le gustaba como amigo y él hacia tremendamente difícil rechazar sus propuestas de manera educada. Se dejó caer en la cama y Slash corrió para posarse sobre su tripa. El ronroneo del gato relajó a Louise hasta quedarse dormida.

Se despertó de golpe al escuchar cómo alguien llamaba a la puerta de casa y el gato corrió a esconderse a su sitio preferido. Algo asustada y adormilada, Louise se acercó hacia la puerta, observando durante el trayecto que había oscurecido. Se acercó a la mirilla y vio al Sheriff de ojos azules esperando en la puerta de su casa. Abrió la puerta y no pudo esconder ni la sorpresa, ni la sonrisa.

- Hola - dijo Rick mirándola a los ojos también sin poder evitar sonreír, pero no era una sonrisa cualquiera, era su sonrisa seductora. Me derrito... ¿desde cuándo me he vuelto tan pastelosa? Pensó Louise. - No me has llamado... - se aclaró la garganta- he venido a ver si estabas bien.

- Verás... me robaron el móvil - dijo rascándose el brazo- acabo de configurar uno nuevo. - comentó mordiéndose el labio para intentar matar la sonrisa que no se desvanecía de su cara. Rick asintió. - ¿Quieres pasar?

- Pensaba que nunca me lo pedirías - ambos rieron y se adentraron hasta sentarse en el sofá.

- ¿Quieres algo de beber? Tengo agua y cerveza - preguntó la joven.

- Emmm... ¿Cerveza? - la chica asintió y desapareció por la puerta para luego volver con dos botellines y un cuenco con papas. - Gracias.

- Esta mañana me pasé por la comisaría, pero no estabas... - comenzó Louise.

- Ah, sí. Shane me pasó el recado cuando llegué. - Louise estaba confusa, Shane le dijo que él no iría.

- Espero no haber estropeado tu chaqueta - dijo con una risa nerviosa dando un trago de su amarga cerveza.

- Huele a ti - dijo Rick bajando la cabeza y rascándose la nuca intentando ocultar que estaba sonrojado ante la confesión.

- Lo siento - murmuró Louise jugando con sus dedos.

- No lo sientas, ojalá siempre oliese a ti - fue el momento de la chica para sonrojarse y sonreír, le encantaba este hombre, no lo podía negar, pero no daría el primer paso, no quería romper esa familia.

Rick levantó la mirada para toparse con la suya, dio el último trago a su bebida dejándola en la mesita y acercó su mano izquierda al rostro de la joven. Tomó un mechón rojizo y lo escondió tras su oreja, aprovechando ese contacto para acariciar su piel. Sujetó su mentón delicadamente y acercó sus labios para dejar un beso en la mejilla rosada de la chica.

- Gracias - murmuró. Estaban muy cerca mirándose a los ojos, compartiendo el mismo aire, la tentación era muy grande. Louise no quería romper una familia, Rick sabía que su familia hacía tiempo que estaba rota, pero de todos modos, no se dio el capricho de besarla, por mucho que quisiera, por mucho que supiera que Lori le estaba siendo infiel, tenía que sanar y no quería que Louise se convirtiese en un daño colateral, no. Ella merecía todo. - Supongo que nos veremos... - comentó mientras se levantaba para dirigirse a la puerta.

- Supongo... - murmuró Louise aún hecha un flan.

Acompañó a Rick a la puerta y la cerró tras ella, dejándose caer al suelo tocando la mejilla que el Sheriff había besado.

Officer Friendly (Rick Grimes)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora