18. (+18)

3.1K 239 37
                                    

- ¿Que sucede Dorothea?

Harper llevaba toda la mañana en el asilo de Londres donde su abuela había pasado sus últimos días; después de su muerte, la rubia seguía yendo a visitar a las mejores amigas de Marjorie.

- No me pasa nada hija.

- Te conozco, se que algo sucede cuando arrugas el ceño y evitas el contacto visual.

La mujer acarició la mejilla de la chica, ante sus ojos seguía siendo la niña pequeña que había conocido.

- Tus padres están buscándote.

Definitivamente no esperaba escuchar aquello.

- Vinieron hace unas semanas buscando a Mar y a tí, ellos están arrepentidos hija.

- No me interesa tía, no pueden aparecer así nadamás.

Harper esbozó una mueca, nadie podía juzgar que les tenía resentimiento por haberla abandonado, suspiró frustrada siendo abrazada por Dorothea.

- Mar no te educó para ser rencorosa, tampoco te estoy diciendo que debas amarlos y aceptarlos, pero quizá debas escucharlos, aunque sea una vez, piénsalo muñeca.

- No lo sé Dor...

Rato después Harper regresó al hotel donde se hospedaba, de lo distraída que iba en su movil agendando diversos eventos que Pattinson tenia en Europa nisiquiera se dió cuenta de que alguien la seguía; no fue hasta al abrir su habitación que sintió terror.

Chris la tomó de la cintura llevándola a adentro, la mujer aterrorizada comenzó a moverse intentando zafarse hasta que reconoció aquel olor de perfume masculino y aquellos brazos fuertes que la rodeaban.

- Soy yo, princesa.

Harper al sentirse libre se giró encontrando a un Chris Evans totalmente diferente; lucía demacrado, ojeroso y sus ojos azules no brillaban; la mujer arrugó el ceño.

- ¿Que haces aquí?

- Perdóname por favor.

Chris la abrazó con fuerza suspirando su dulce aroma, besaba su frente con mimo disfrutando aquel momento; había sido una locura haber comprado el primer vuelo a Londres que encontró.

- Vete, Chris por favor.

- No, hasta que me perdones, no debi dudar de tí.

Harper cerró sus ojos con fuerza evitando llorar, cuánto había extrañado al hombre, el frío y el temor que había sentido regreso del asilo se había esfumado.

- Te perdono, pero por favor vete, ahora estás con Jenny y...

Chris la besó callandola, gimió al sentir sus lenguas mezclarse, no quería abrir los ojos con temor a que aquello se esfumara, Harper se aferraba a su cuello con sus manos, mientras las suyas se deshacian del vestido que la mujer traía.

- No la amo, no la necesito, como te necesito a ti.

Harper sonrió al escuchar aquello, camino con él hasta dejarlo caer en la cama, le guiñó un ojo y con coqueteria comenzó a desnudarse frente a él haciéndolo tragar en seco, el actor aprovechó para deshacerse de su ropa, cuando ambos quedaron en condiciones iguales, la atrajo hacia él haciendola chillar riendo.

𝘓𝘰𝘷𝘦𝘭𝘺 𝘔𝘢𝘯Donde viven las historias. Descúbrelo ahora