Tierra-53 Vol. 3 Guerra

Capítulo 16: Batalla en Ciudad Star

Sara pov

Nyssa ya se ha marchado con gran parte de los asesinos, solo unos cuantos se quedan conmigo para unirse a mi en el campo de batalla, el Bunker ya está desierto salvo por nosotros, René y Curtis fueron los primeros en marcharse, las T-Spheres harán reconocimiento real de la situación, Dinah está coordinando las cosas con papá y la SCPD, desearía estar ahí, pero Ollie me dejó a cargo, confía en mi y no lo decepcionaré

Finalmente salgo con el traje de Canario Blanco de Cisco para unirme a Laurel, Thea y Roy, me miran esperando órdenes, asiento y entramos al ascensor, las puertas se cierran y comenzamos a subir, noto a Thea y Roy de la mano, ella la aprieta, tiene miedo, es normal, yo también lo tengo, pero debemos sobreponernos a ellos, afuera un auto de A.R.G.U.S. nos espera.

Subimos, veo a los asesinos seguirnos de cerca, desde ahí podemos ver la torre y a los Parademonios, le pido a Laurel que acelere, creo que ya tardamos demasiado, mientras mas nos acercamos vemos a mas y mas personas huyendo, algunos son perseguidos por estas cosas, nuestros asesinos saltan a la acción defendiéndolos y retirándose en las sombras.

En cuanto bajamos Roy y Thea lanzan flechas a sus objetivos, se marchan con la mitad de los asesinos, su misión es llegar a la torre y derribarla, escucho un grito a mi espalda, Laurel ya emepezó su ataque, juntas nos abrimos paso, sus ponfas fueron mejoradas usando la misma tecnología que los bastones de Nightwing así que un toque derriba a los Parademonios.

Yo prefiero usar mi bastón para noquear, lanzar y alejarlos, no es mi ideal de pasar tiempo con mi hermana, pero lo tomo, no quisiera estar en otro lugar. Llegamos al centro de todo, ahí nos reunimos con Nyssa quién nos informa la situación, Curtis y René van camino a la caja padre. Nos llega una transmisión de Felicity diciéndonos que la SCPD ya está en el lugar, las armas de Cisco son efectivas.

Escuchamos mas explosiones de todos lados, no podemos quedarnos ahí, una enorme ola de Parademonios nos miran desde el cielo y descienden, nos refugiamos, pero no todos tenemos suerte, escucho como algunos de nuestros Asesinos gritan mientras son llevados al aire, mordidos o despedazados, es una pena, son Hombre y Mujeres que no pidieron estar en esta pelea, pero no se marcharon cuando Nyssa les dio la oportunidad.

A lo lejos veo que algo explota en el aire llenando los cielos con fuegos artificiales, es la señal de Thea, ya están en el lugar, ahora debo esperar los segundos fuegos artificiales para que nos cubramos, Nyssa ve mi reacción y ordena seguir avanzando, los asesinos obedecen, Laurel nos brinda protección con su grito, una parte de mi cree que es muy sencillo.

Thea pov

Los asesinos, o casi todos se separan para buscar la ubicación mas optima para lanzar el regalo que les tenemos preparados a estas cosas, solo dos se quedan con nosotros, debemos quedarnos aquí hasta que regresen, Nos escondemos en un cuarto de servicio en la azotea donde es fácil defender nuestras posiciones, ya sea a distancia o cuerpo a cuerpo, las paredes lucen resistentes, hasta ahora.

- Thea, se que no es el mejor momento, y que probablemente me mates pero tengo algo que preguntarte.

- ¿Ahora Roy? te amo, pero no creo que sea el momento y lugar adecuado.

- Puede ser, pero, tal vez no tenga otra oportunidad así que...

Cuando veo que se queda callado giro a verlo y lo encuentro hincado, sacando algo de su bolsillo, un anillo, me pregunta si me casaría con él, yo no se que decir, claro que quiero casarme con él, pero ahora tengo que estar concentrada, me acerco, tomo su mano y la cierro.

- Pregúntame cuando salgamos de esta y te llevarás una gran sorpresa.

Le sonrió y el entiende mi respuesta, se pone de pie y me da el anillo, pide que lo cuide hasta que esto termine, lo tomo y lo guardo. Escucho algo chocar contra una pared, segundos después, de nuevo y de nuevo, poco a poco la pared comienza a ceder revelando el puño de un Paredmonio, un asesino se acerca y lo apuñala sin darle tiempo a la criatura de reaccionar, pero luego su espada le es arrebatada por otro Paredemonio.