Corazón Ardiente [Endeavor/Enji Todoroki y Tu ]

《 11 》

"Embriagante velada"

-Solo déjate llevar por tus emociones, el destino hará el resto-

Se suponía que sería su día de descanso antes de partir a una misión con su amado y los aspirantes a héroes, pero.... Al parecer los planes que tenía trazados ese día, fueron derrumbados por una llamada de su mejor amiga, la cual estaba muy molesta.

Un ligero suspiro salió de los labios rosados de la peliverde, estando sentada en un cojín, se encontraba en un restaurante tradicional japonés, una albina estaba muy animada bebiendo sake al otro lado de la mesa.

-Jajaja, ¿y sabes que mas dijo el imbécil de mi marido? —golpeo la mesa mientras reir la albina, T/N se encontraba bebiendo un poco de te —

-No, no lo sé Elizabeth —respondió la peliverde mientras alzaba la vista observando a su mejor amiga que estaba completamente ebria —

-Que no podría celebrar nuestro aniversario porque su jefe lo dejo cargado de papeleo — dijo de manera irónica la albina mientras apretaba con fuerza la pequeña taza con sake — Te juro que lo matare

T/N no le tomo mucha importancia a esa amenaza que había hecho su mejor amiga, solo tomo un sorbo de su relajante te de menta, mientras escuchaba todo lo que tenia que decir la mujer de ojos ámbar.

-Y tú que te preocupaste en darme el día libre —sorbo un poco su nariz Elizabeth mientras tomaba mas sake soltando un suspiro pesado —

-Ah... Elizabeth no te preocupes por eso... —se inclino un poco en su lugar hacia adelante posando su mano en el hombro de la fémina borracha, dándole una sonrisa comprensiva —

-T/N-chan... —expreso con alegría la albina —

-Pero....—la expresión en el rostro de la ojilila cambio totalmente a molestia — ¿¡COMO RAYOS SE TE OCURRE TRAERME A ESTE LUGAR Y MAS CUANDO ESTAS MAS EBRIA QUE EN TU FIESTA DE DESPEDIDA DE SOLTERA!?

La albina se encontraba temblando en su lugar mientras veía como un aura aterradora cubría a su mejor amiga la cual estaba chocando uno de sus puños en su mano libre.

-¡T-te juro que te recompensare! —Alzo sus manos frente de su rostro cerrando sus ojos con fuerza escondiéndose de la ira sobre humana de la Furawa—

-Ah, está bien —después de todo eran amigas, T/N tomo asiento nuevamente degustando de la carne recién salida de la plancha — Apropósito, ¿donde dejaste a los niños?

-Eh, pues veras los deje con mi hermano —puso su dedo índice en su mejilla con una sonrisa socarrona —

T/N sabía perfectamente que significaba esa expresión.