Haruna Hatake. [HN+SG]

Capítulo 38.

─No se quien eres tu realmente. ─Comento la peliplata mirando al de cabellos negros. ─Pero mi amiga está loca por ti, eres un idiota a mi perspectiva por rechazarla.

─En ningún momento pedi tu opinión. ─Contesto el pelinegro lanzando delicados golpes al aire. ─Ella es la idiota por solo fijarse en apariencias.

─Pues yo también pienso lo mismo.

El joven chico dejo de entrenar para voltearla a ver.

─Dime Uchiha... ¿Que es lo que te hace tan especial?

─Si te lo digo te vas a enamorar igual a todas. Mejor ve en busca de tu estupida amiga a mimarla como idiota.

─Pues dejame decirte que es exactamente lo que voy a hacer. Mi amiga no merece tener gustos tan groseros y anticuados como tal persona que veo.

─Piensa lo mismo en dos meses, estúpida.

─Mi pensamiento nunca va a cambiar, Uchiha idiota.

Fue lo último que la peliplata dijo antes de salir corriendo fuera de aquel distrito en la aldea. El distrito Uchiha.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.

─Haruna, ¿Vas a despedirte de los chicos? ─Preguntó el pelinegro reincorporandose en la cama que compartíamos.

─Voy a hacerlo, solo espera que salga el sol. Gaara dijo que no se irían antes de almorzar. ─Contesté colocandome pecho abajo en la cama, aun estaba adormilada.

─Levantate, Haruna. Ya comienza el día.

─Lee, son las cuatro de la mañana.

─Es la hora en la que el día comienza, levantate y vayamos a entrenar con Guy sensei. ─Insistió Lee causando que resoplara.

─Bien. Sólo me cambiare y listo.

Me levante en cuanto lo escuche reírse, encaminandome hacia el armario del cual saque la vestimenta que no llevaba desde el atentado con Sasuke. Sin siquiera preguntar, me desprendi del camisón y me coloque la ropa, no voltee hacia Lee hasta que sentí su tacto en mi espalda baja.

─¿Que pasa? ─Pregunte volteandolo a ver, estaba sentado en una orilla de la cama justo frente a mi.

─Nunca me habia dado cuenta del lunar que tienes aquí. ─Comento rodeandome con sus manos y tocando justo el mismo lugar que antes habia tocado.

─¿Un lunar? ─Pregunté acercandome al espejo intentando ver.

─Vas a lastimarte. ─Hablo Lee tomandome de los hombros. ─Si estas lista, vayamos. Guy sensei siempre me da el desayuno.

─Entonces vayamos. ─Respondi tomando mi bandana y colocandola en mi cintura. ─Pero que sea por la ventana.

Lee negó levemente mientras sonreía antes de abrir y salir de un brinco por la ventana, hice lo mismo y sali a las calles nocturnas de Konoha.

─Oye, Lee... ─Hable en cuanto comenzamos a correr por los tejados de la aldea.

─¿Si?