SWEET DREAMS | chanlix

tres

—¡Mamá hoy también soñé con él, el chico de cabello blanco!

—¿Otra vez?

—¡Si! el chico de ojos azules, me pregunto quién será, no siempre sueño con él, pero cuando lo hago, siempre jugamos y es muy divertido.

—Bueno, al menos son buenos sueños.

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Chan se iba a la escuela temprano, esa era su última semana de clases y luego irían a un campamento como curso, estaba muy emocionado, le gustaba la naturaleza y jugar con sus amigos, el chico de cabellos rubios era muy sociable, tenía amigos verdaderamente muy unidos a él y siempre lo acompañaban a todas sus aventuras.

Siempre les contaba sus sueños y terminaban diciéndole raro por soñar siempre con la misma persona, pero cuando le pedían que lo dibujara para saber cómo era, a Chan le parecía imposible hacerlo, aunque sabía muy bien cada facción del chico, no podía realmente dibujar todo lo que sus ojos veían en sus sueños, aun así podía fácilmente describirselos.

Les decía que era como un chico dulce, de ojos grandes y azules, de rostro delgado, pecas bajo sus ojos y piel blanca además de su cabello, que cubría su frente y con mechones largos en la nuca que tapaban su cuello, era de contextura delgada y muy delicado, y que cada vez que lograba hacerlo sonreír, una pequeñas arruguitas lograban aparecer a los costados de sus ojos, era silencioso y cauteloso, siempre miraba a su alrededor con curiosidad y algo de miedo, y por ello siempre permanecía a su lado intentando protegerse, y que en sus sueños él era el único en el que ese chico confiaba.

Y se preguntaba si ese aspecto casi angelical era realmente la forma en la que su subconsciente representaba la belleza, porque a sus ojos Felix era el ser más hermoso que nunca había visto antes, era divertido pasar el tiempo con él y ver las expresiones de su rostro con cada cosa nueva que le mostraba en cada uno de sus sueños.

Él siempre estaba muy frío cada vez que lo tomaba de la mano, y aunque se viera feliz, sabía que algo no andaba bien con ese chico pálido, a veces se le quedaba mirando por minutos enteros intentando descifrar esa mirada profunda en esos colores azules de sus ojos, y se preguntaba cómo podía ayudarle, siendo que sólo era un sueño.

Y deseaba en lo más profundo de su corazón que algún día pudiera estar consciente en los sueños y preguntarle aquellas incógnitas que tenía cada vez que despertaba, y se odiaba a si mismo cuando desafortunadamente olvidaba sus sueños al despertar, pero quedaba con la impresión de que había soñado con él, todo era muy extraño y se sentía tan real que hasta pensaba que se estaba volviendo loco.

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Un día de fin de semana, le tocó levantarse temprano y como era parte del consejo de curso, Chan debió reunirse con el resto de los miembros e ir a comprobar la locación donde sería el campamento la próxima semana, por suerte algunos de los miembros del concejo eran sus amigos y podrían divertirse cuando llegaran al lugar.

Chan caminó en dirección a la escuela y cuando estuvieron todos, tomaron el bus en dirección al bosque que habían elegido para pasar la semana de campamento, estaba emocionado, Ethan también lo estaba junto a Nick, sus amigos, y junto a unos tres compañeros más se dejaron llevar hasta que llegaron al místico lugar.

Los chicos inspeccionaron cada rincón del área, el dueño del lugar era muy amable y les mostró que no había nada de que temer si querían pasar la noche con carpas, pero como concejo les dijo que debían traer mucha ropa para abrigarse y mantas para la noche porque la humedad y el frío era demasiado incluso para él, que según lo que les contaba, tenía mucha experiencia acampando en el área, los chicos conversaron un tiempo y luego fueron a recorrer el lugar.