Destinos encontrados

Dolor

Capítulo con largos giros en el tiempo. Espero no confundirlas. Ahora sí, solo un capítulo más (espero) 🤪

Los días siguieron pasando y después de conocer a Denisse, Lena no pudo alejarse de las Zor-El.

El conocer a esa pequeña había movido algo dentro de ella. Se veía tan frágil y dulce que quería protegerla de todo. No lo entendía pero tampoco podía luchar contra eso.

Y nuevamente alargó su partida.

Se quedó un tiempo más alegando querer conocer a la pequeña, aunque en realidad también quería ayudar a Kara.

—Eres hermosa y te estoy queriendo más de lo que debo princesa —le susurro a la pequeña que dormía en sus brazos, mientras Kara preparaba la merienda.

—Vas a mal acostumbrarla —le regaño Kara —luego solo va querer estar en brazos.

—Y cuál es el problema?

Kara rodo los ojos. —¿Cuando tienes que irte?

—Debería haberme ido hace más de 1 semana…

—Entonces…

Lena suspiro reacomodando a la niña en sus brazos

—No lo sé… Quiero decir ya no tengo nada que hacer aquí laboralmente… pero no puedo simplemente irme así… ahora que te encontré… que las encontré —sonrio recordando a la pequeña y todas emociones que está la hacía sentir. Nunca había sido una persona maternal pero la pequeña Denisse movía cosas dentro de ella que le hacía no querer dejarla. —hay algo que no me permite irme sin mirar atrás. Sin embargo no puedo seguir posponiendo mi partida, de un momento a otro Sam va a exigir mi regreso a National City.

—Quien es Sam?

—Mi vicepresidenta a la cual le estoy cargando todo el trabajo.

—Lo siento…

—¿Porqué?

—Porque siento que es mi culpa, te estoy reteniendo aquí

Negó

—Estoy aquí porque quiero

***
Más días después

Kara le ha dejado a Denisse a Lena al no poder contar con Astrid y Andrea para cuidarla, mientras ella tenía que presentarse en el restaurante de último minuto.

Al principio todo estuvo bien, pero con el pasar de las horas Denisse comenzó a llorar y Lena no ha podido lograr tranquilizarla.

Comienza a caminar con ella entre sus brazos mientras la mese suavemente, pero nada parece ayudar a que la bebé logré calmarse. Quizás la razón sea que Lena tampoco logra hacerlo y por consiguiente se lo transmite a la niña.

Llame a Sam desesperada y está le dice que le cante.

Entonces recuerda una canción que su mamá solía cantarle cuando era una niña e inmediatamente una pequeña sonrisa se posa en sus labios.

—Creo que te gustará escuchar esto preciosa, al menos a mí solía gustarme, por favor no esperes mucho de mi voz porque cantante no soy —bromeo, recibiendo un pequeño quejido como respuesta. —Publico difícil, está bien —beso su frente.

Si pudiera cantar un sol
Cantaría para ti todo el tiempo
Si pudiera cantar una sonrisa
Cantaría una tan grande como la mía
Cuando pienso en ti…

Tarareó recordando todos los momentos en compañía de la pequeña. Apenas hacía unas semanas la conocía y ya ya sentía tan dentro de su corazón.