Get you back: ¿Recuperarte?

Capítulo 9

Daban las 8am del día Sábado, Asami salía de su habitación con un pantalón de pijama recién puesto. Al entrar al comedor, Akihito y Uzuki desayunaban charlando.

-Buen día.-Se sentó en la punta de la mesa y se sirvió café puro en su taza.
-¿Mucho trabajo?-Preguntó Uzuki con cizaña sorbiendo su taza.

Asami le dedicó una mirada llena de odio.

-¿Quieres saber con quién?
-Asami...-Akihito lo medio pateó por debajo de la mesa.
-Yo pregunté bien.-Se excusó Uzuki.-Tu cara no es la mejor, por eso.
-Aja..-Se limitó a asentir, miró a un costado y su hijo se removía con energía en aquél cochesito. Dejó la taza un poco más alejada y lo levantó en brazos.-Hola Dome.-Susurró apoyándolo sobre su pecho.
-Llamó el doctor, dijo que estaría aquí para las 10.-Le dijo Akihito.
-Se te ve mejor.
-Sí, hoy me siento muy bien, no me duele.-Sonrió. Pero el rostro de Asami seguía serio.-¿Pasó algo?
-Nada que deba preocuparte. Estaré en la oficina.-Se levantó con su hijo en brazos yéndose.
-¿Qué le sucede ahora?-Preguntó Uzuki.
-Debe ser trabajo.-Frunció sus hombros. Aunque algo no olía del todo bien.

Al entrar, Kirishima ya estaba allí bebiendose un café.

-Buen día, Jefe.
-Buen día, Kirishima.-Se sentó en su sillón poniendo a Dome sobre él mirando hacia el frente. Éste movía sus manitos y piernitas.
-¿Qué quiere hacer?
-Me contactaré con mi hermano, ¿Encontraste su número?
-Sí, seguía en su agenda, señor.
-De acuerdo.-Tomó el teléfono y marcó.

-¿Diga?
-¿Maxim?
-¿Ryuichi?
-Sí.
-Milagro, ¿te estás muriendo o qué?
-Créeme, que serías al último en llamar si algo me sucediera directamente a mi. Pero ahora hay alguien más importante en juego.
-De todas formas, no me interesa.
-¿Crees que a mi me interesa saber lo que a ti te interesa o no?
-Ah ya, voy a colgarte.
-No idiota, espera. Necesito que me pases los nombres rusos de los enemigos de la organización.
-¿Por qué no llamas a padre?
-Maxim...-Gruñó.
-Él te lo facilitaría más rápido.
-No quiero hablar con él. ¿Puedes hacerme este favor? ¿Sí o no?
-¿La vida de quién está en riesgo, si no es la tuya?
-La de mi hijo.
-...
-¿Te moriste?
-No bromees Ryuichi.

Dome comenzó quejándose y terminó largando sus llantos desconsoladores.

-Ahí lo tienes, lo haz hecho llorar.-Se levantó, dejando el teléfono entre hombro y oreja y comenzó a mecer a Dome.
-No. Bromees. Ryuichi.
-Escúchame, Maxim. ¿Tú crees que tengo tiempo para ponerme a bromear?
-¿Tú sabes la amenaza que tu hijo significa para ti?-Levantó la voz.
-Claro que sí.
-¿Cuándo nació? ¿Por qué no figura aquí como Asami?
-Nació hace 10 días. Aún está en trámite su cédula de identidad.

Se escuchó el suspiro pesado de su hermano.

-Oye Maxim, no actúes como si te estuviese pidiendo que resuelvas mis problemas.
-Ya ni recuerdo para que llamaste.
-Necesito que me des los nombres de los enemigos rusos de la organización y de algún viejo chino.
-De acuerdo, no te prometo nada, pero veré que te puedo conseguir.
-Gracias.
-¿Dónde lo tienes?
-En mi casa, ¿dónde más?
-¿Quién es su madre?
-Padre, querrás decir.
-¿Qué?
-Él, es.. hijo de un doncel.
-Cuando no parecía poder ser peor... Apresúrate con ponerle tu apellido.
-¿Por qué?
-Podremos intervenir nosotros. Padre debe saberlo.
-No quiero que él lo sepa, ya estás fabulando, Maxim.
-Ryuichi, mencionaste a un viejo chino, ¿No es así?
-Sí.
-¿Qué hizo?
-Envió a un imbecil a entregarme fotografías mías llevando a mi hijo por la calle.
-Bueno, conoces la tradición de China, ¿No es así?
-Sí, Maxim, la conozco.-¿A dónde quería llegar?
-Ese tipo lo que está buscando es robarse a tu hijo. No planea asesinarlo, ni hacerte daño a ti, no por el momento. Quiere apropiarse de él, quiere ponerle su apellido, volverlo poderoso y fuerte digno de un hijo de doncel y luego, seguramente sí, hacerte daño, a la mayoría de edad le hará reclamar tu paternidad biológica y quedarse con todo lo que lleve tu apellido.
-Maxim...
-¿Mh?
-Él es lo más importante que yo tengo ahora. No mis bienes, ni mis pertenencias, ni todo el dinero del mundo. Mi hijo ahora es mi prioridad, y yo quiero su bienestar. Por favor, trata de conseguirme aquella información.
-Lo haré, no tengas dudas. Y tú por favor, considera hablar con padre. No pienses en tí, piensa en tu hijo Ryuichi.
-De acuerdo, veré que hago. Contactame.
-Si, ni bien tenga la información, te llamaré.
-Bien, adiós.
-Ryuichi...
-¿Qué?
-¿Cómo se llama?
-Dome.
-Me gusta.
-Gracias.
-Bueno, hablamos pronto.
-Adiós.