˖ ˚ ｡ ♥︎ 𝗜𝗡𝗦𝗧𝗔𝗡𝗧 𝗖𝗥𝗨𝗦𝗛 ꔛ 𝖩𝖨𝖲𝖴𝖭𝖦 ଓ

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―¿Y bien. . . de qué tratará nuestra historia? ―preguntó Chaer con la mirada perdida y mordiendo la punta de su lápiz.

Misaki tenía una idea pero sería muy cliché, la consigna era ser creativas y dejar volar la imaginación.

―¿Alguna vez se han enamorado o tienen algún tipo ideal?

Para hacerle la tarea más fácil a las tres podría fácilmente tomar uno de sus escritos y copiar y pegar pero. . el problema es que son demasiado personales, tal vez debería escribir otro disimulando la historia de amor que quería tratar de contar.

―No ―respondieron al unísono.

Bueno. . sería un poco más difícil.

―Misaki busca el libro de poemas que está al final del pasillo. . tal vez y si sacamos un poco de inspiración de allí nos sirva ―pidió Ryujin dejando caer los lápices en la mesa.

Sin rechistar fue con pasos cautelosos al final del pasillo y después de tanto buscar con la mirada finalmente lo encontró pero en el último piso del estante.

¿Por qué el libro debe estar tan malditamente alto o por qué construyen estantes tan altos, acaso no piensan en la gente de estatura más baja? ―pensó con intenciones de trepar al estante.

Intentos fallidos al tratar de alcanzarlo, ni hasta de puntillas de pie pudo llegar, refunfuñando estaba a punto de darse media vuelta en busca de una silla. . pero su camino estaba obstruido.

―Yo me pregunto. . ¿qué les cuesta crecer? no es tan difícil ―comentó un chico apoyándose en el estante, con las manos en los bolsillos del uniforme

El rostro de la japonesa era un poema a medio terminar. . el protagonista de sus más hermosos y sinceros relatos había vuelto a clamar presencia a su lado logrando que su peor enemigo, su nerviosismo se active.

―¿..Cómo..? ―su rostro mostraba confusión y sorpresa pero sobre todo en su interior había pasado un huracán de otras mil emociones y sentimientos causando estragos en su ser completo.

―Eso, ¿por qué eres tan baja? es impresionante que alguien sea de estatura tan baja ¿no tomaste vitaminas? ―rió Jisung mirándola pero ella solo tenía los ojos bien abiertos contemplando al ser que sacaba unos veinte centímetros más―. Misa. . me duele el cuello de tanto mirar para abajo, por favor dime que libro necesitas ―musitó gracioso buscando los ojos de la chica quien ahora se encontraba viendo un libro del estante que tenía enfrente.

¿Esto es real? por favor, jamás la despierten este sueño. . oh, esperen ¡ es la realidad !

Ya es la tercera vez que intercambia miradas con él, las veces anteriores solo ella lo veía a lo lejos. . ¡pero tanto soñó con este momento que ya han pasado tres veces!, aunque no estaba mentalmente preparada para estos momentos.

Pero al parecer para Jisung no era algo tan especial o emocionante, solo le quería ayudar.

―¡Claro! hmm. . ese ―señaló un pequeño libro que estaba en la cima pero su corazón comenzó a palpitar más de lo normal cuando el chico de hebras castañas se quedo viendo la portada y el interior del libro―. Es para una tarea de literatura ―se apresuró a decir.

―¿Un libro de poemas. . ? yo también tengo una tarea igual pero. . ¡espera! ―comenzó a buscar una página en específico, su mirada no se despegaba de las páginas pero una sonrisa se formó en sus labios dejando a la vista sus dientecitos de avena―. Mira, este escrito va a la perfección contigo.

"Pequeña niña de ojos melosos
pululas de aquí para allá
dejando pequeños rastros
de tus diminutos pies

tu tan chiquita estatura
al querer alcanzar las florecillas
me hace confundirte
con una linda hada"

Ese verso. . ¿se lo dedicó a ella?

No dejaba de releer y releer aquellas simples palabras pero ella le encontraba tan lindos significados, cada una tomaba un sentido especial solo porque él se las dedicó.

―Me hizo acordar a ti. . por tu estatura ―rió de manera risueña pero una mini sonrisa se formó en ella y él de los nervios rascó su nuca―. Pensé que te ofenderias pero me alegra haberte sacado una sonrisa. . supongo que nos vemos ― se dio vuelta y una esplendida sonrisa hizo presencia en él, finalmente el chico se había ido a su mesa dónde lo estaban esperando sus amigos.

Jamás hubiera pensado que tal vez este momento le pasaría. . digamos, hay muchas más personas en la biblioteca y que justo él estaba allí lo hace tan irreal. . ¿acaso estaba predestinado?

Además, el verso que le dedicó por su pequeña estatura le pareció un acto inmensamente adorable, bonito y un poco gracioso. . una nueva pequeña anécdota para grabar en su diario.

―¡Por fin volviste amiga! ¿por qué tardaste tanto? ―especuló Ryujin alzando sus manos al cielo pero la japonesa solo estaba con una sonrisa boba de oreja a oreja, con la mirada perdida y su cabeza yacía en sus brazos cruzados, por lo que la miró con las cejas fruncidas―. ¿Acaso te pasó algo inolvidable?

―Si tan solo supieras. .―murmuró ahora escondiendo su rostro en sus brazos y largando un pequeño chillido de emoción.

Ryujin y Chaeryeong solo se miraron confundidas entre sí alzando sus hombros en manera de no entender lo que ocurría, pero le restaron importancia dejando a Misaki en su nube del amor y comenzaron a buscar ayuda e inspiración en el libro de poemas.

Por otro lado, estaba Misaki en un viaje astral a los campos del amor, volviendo a pensar y analizar el acontecimiento que sucedió hace unos pocos minutos. . aunque para ella duró horas y hubiese deseado que nunca terminase.

―¡Esto es tan difícil! ―rezongó Chaer dejando caer su cabeza en la mesa.

―Déjamelo a mi ―sonrió y comenzó a escribir sin posar ningún dedo en ese libro, lo que saldría de esa hoja de prueba serían palabras cosechadas por su corazón, la inspiración le había dado una nueva visita en su alma.

Ahora mismo tenía los sentimientos a flor de piel, quería demostrar y plasmar todo lo que sentía en aquel mismo instante, tenía que aprovechar de la lluvia de inspiración y del palabrerío que había florecido en ella.

―Por dios Misaki ¡desde aquí puedo leer la obra de arte que está saliendo de tu imaginación! ―vociferó Chaer sorprendida.

―Lamentamos no poder ayudarte mucho ―se disculpó Ryu un poco avergonzada―. Pero esperamos que nuestras torpes palabras ayuden a tu historia. . no queremos que cargues con todo el trabajo ―dijo y extendió un papel donde estaban escritos unos pocos versos que ellas dos habían intentado crear gracias al libro de poemas.

Misaki solo asintió con una linda sonrisa, agradecía sus granitos de arena en forma de ayuda.

Mientras tanto ella anhelaba que algún día aquél poema llegue a las manos de Jisung. . tal vez y le guste mucho ♡.