Kimmon
2:30 am.
— ¿Por qué ahora? ... ¡¿por qué hoy?!— exhalé totalmente agotado, la cabeza me daba vueltas y sinceramente no tenía mas fuerzas para batallar.
No era la primera vez que estos pensamientos perturbaban mi noche, pero ¡¿hoy?! ¿en serio tenía que pasar hoy? Lo peor es que yo ya sabía que esto iba a terminar en un insomnio fatal y tenía grabación más tarde ... ¡Argh! iba a estar terrible frente a cámaras. Lleve ambas manos a la cabeza y froté mis ojos con fuerza de la desesperación.
— ¡¿Por qué?! ... ¿Es alguna clase de castigo? ¿Es que acaso todo esto no es suficiente ya? — me quejé al borde del llanto como si alguien pudiera oírme.
Tengo que pasar por él hoy, ¿Cómo se supone que voy a mirarlo estando así? No dejaba jamás que este sentimiento me embargara cuando debíamos trabajar, no dejaba jamás que alguien lo notara, no había rastro de que existiera, nadie podría siquiera sospechar todo lo que él me hacía sentir con su sola presencia. Yo solo dejaba salir todo esto, toda esta pasión, todo este anhelo en periodos de descanso, yo solo me mostraba vulnerable cuando no tenía nadie al lado para que mi soledad sea único testigo de mis miserias. Pero últimamente lo estaba viendo a diario, me estaba deleitando con su perfecta imagen, me estaba embriagando con su dulce aroma, llenándome de él, se estaba metiendo cada vez más bajo mi piel y no sabía detenerlo, no podía detenerlo, no quería detenerlo. En todos estos días no había tenido una "pausa de él" y Dios sabe lo muy agradecido que estaba por eso, sin embargo sabía que algo así tarde o temprano pasaría.
Copter me estaba volviendo loco y yo no me iba a hacer el difícil ante eso. Me gustaba, me gustaba demasiado todo lo que provocaba en mi. Desde hace unos cuantos meses atrás algo cambió, no sé con exactitud que fue lo que pasó; no sé si fue él o si fui yo, realmente no lo sé, tan solo así, como por causa y efecto, como por lógica y razón un día me encontré mirándolo mas de lo normal, me hallé perdido en su sonrisa, en su hermosa sonrisa y sus perfectos hoyuelos que me invitaban a fantasear y perderme en ellos, me encontré hipnotizado por su mirada. Por esos ojos pardos que me regalaban el cielo cuando en mi se fijaban, por esa naricita traviesa que movía tanto para hacerme todo tipo de muecas, por esos dulces labios rosados que me hacían más de mil y un pucheros. ¿Qué como sabía que eran dulces? Pues tenían que ser así, no había otra opción. Bastaba con verlos para soñar con ellos, con la magia en que me envolverían con tan solo un roce, con el placer que me regalaría su sabor y que yo devoraría con descontrol. Sí, con descontrol y desesperación y es que Copter enserio me tenía mal, me tenía a sus pies y el no lo sabía, el jamás lo sabría y yo sentía que ya no lo podía ocultar. Y de repente, su cercanía me daba paz pero a la vez su presencia me hacía sonrojar, me hacía temblar y su tacto me causaba emoción y sus palabras eran todo lo que quería escuchar, él me hacía falta en todo momento y en todo lugar y cuando menos ya me hallaba pensando siempre en él y en las mil y un posibilidades para poderme acercar.
En algún momento de mi delirio había tomado el móvil en mis manos y dejando salir a flote mis más profundos deseos su nombre brillaba en la pantalla en medio de la oscura habitación que me acobijaba.
— ¿Qué rayos vas hacer Kimmon? ... Son las 3 de la mañana. — Suspiré nervioso, como si no fuera consiente del acto desesperado que estaba a punto de realizar.
Mi parte "racional" trataba de que mantuviera la cordura a pesar de que mis deseos, mis impulsos y mis sentimientos pidieran a gritos otra cosa. Había una vocecita que no me dejaba en paz, esa vocecita que me decía: "¡vete a dormir y deja de fantasear!"
No podía, por más que intentara, por más que debía, no podía. No quería, no era fácil. ¿Sólo cerrar los ojos y apagar el fuego que me consumía por dentro? Imposible. Estaba desesperado, necesitaba oírlo, aunque sea un segundo, un instante de su voz, sentir su respiración, su risa, un reproche, lo que fuese, algo, lo que sea, lo más mínimo era lo que necesitaba para saciar mi sed de él. Quizás solo así podría volver a mi estado normal, quizás solo así podría volver a ser el Kimmon fuerte, el que era solo su amigo incondicional.
ESTÁS LEYENDO
➸ Would you be mine? ⁃ KimCop ⁃
Fanfiction" ... ¿Qué pasaría si te beso? Dime, ¿qué harías si un día de estos solo me acerco y apago esta sed, estas terribles ganas que tengo de ti, que me no me dejan dormir, que me roban los suspiros, las horas del día, la vida? Entonces ... ¿sería el fin...