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Capítulo diez.

- Mmmmm, ¿Qué pasó con el empleo para Ron? - le preguntó un tanto nerviosa.

- ¿Recuerdas que me dijiste que a Ronald le gustaba arreglar computadoras y esas cosas?

- Si.

- Bueno mi padre trabaja en una empresa de Autos y necesitan una persona que este siempre a su disposición para arreglar las computadoras que se tildan cada dos por tres.

- ¿Entonces eso quiere decir que va a tener un trabajo fijo?

- Al parecer si - dijo.

Ella sonrió emocionada y brinco un poco en la cama. Josh negó divertido con la cabeza y le pidió el hielo.

- ¿Cuándo comenzaría a trabajar? - le dijo ella.

- Mañana tiene que ir a hablar con mi padre, para que él lo lleva hasta ahí. Y luego todo queda en manos de él.

- Oh Josh, de verdad no se como voy a hacer para pagarte esto que estas haciendo por mi hermano.
- No lo hago por tu hermano, lo hago por ti - le dijo. Ella sintió como la sangre llegaba rápidamente a sus mejillas.

- ¿Te molesta si fumo? - le preguntó.

- No es de mi agrado que lo hagas, y lo sabes. Pero no me molesta - dijo.

Ella rió por lo bajo y se puso de pie para abrir la puerta del balcón. Tomó su bolso y busco su caja. Tomó un cigarrillo y se sentó a la puerta para que el humo no quedara en su habitación.

Josh se puso de pie y se acercó a ella, se sentó al frente y miró hacia fuera. Su casa se veía desde su balcón. Volvió su mirada a Tamira. Ella también lo miró.

- ¿De que otra cosa me tenías que hablar, Josh? - le preguntó.

Él se tenso. Se había olvidado por completo que en la tarde le había dicho que quería hablar de otra cosa con ella. ¿Y de que era lo que le quería hablar?

- ¿Cómo de que quiero hablarte?

- Si - dijo ella asintiendo - Hoy me dijiste que tenías que hablar conmigo de algo más que lo de Ronald.

- Mmmm, en realidad no tenía que hablarte de nada
más - le dijo. Ella lo miró bien.

- ¿Entonces?

- ¿Entonces que? - dijo él

- ¿Para que viniste además de eso?

- Para verte a ti.

- ¿Qué? - le preguntó sorprendida. Él cayó el lo que había dicho.

- Si, para verte a ti y pedirte que me ayudes a cambiar mi imagen - acotó nervioso.

- ¿Cambiar tu imagen? - dijo ella sin entender.

- Si, estoy cansado de que me vean como el raro por vestirme así y necesito tu ayuda. Además te dije que quería un tatuaje.

- ¿Estás loco? ¿Un tatuaje? Eso es para toda la vida. Además de que si tu madre se entera te mata.

- Ya dije que mamá no se enterara y que además quiero uno porque creo que son geniales.

- ¿Y como que, por ejemplo?

- Mmmm, no lo se - dijo y sonrió.

- No seas extraño, extraño. Mañana lo hablamos mejor, ya es tarde - dijo poniéndose de pie.
Josh se paró rápidamente.

- Si, será mejor que me vaya. No quiero que Ronald me encuentre - le dijo divertido. Ambos se quedaron callados - Avísale.....que mi padre lo espera mañana.

𝗘𝗹 𝗽𝗿𝗶𝗺𝗲𝗿 𝗮𝗺𝗼𝗿 𝘀𝗶𝗲𝗺𝗽𝗿𝗲 𝗱𝘂𝗲𝗹𝗲 Donde viven las historias. Descúbrelo ahora