Immortal

Chapter 12 In the Shadows

Al ver esa nota sentí que Rose tenía razón ... Debía entregarme y ser el juguete de Alastor. Me sentí tan culpable por tía Cass... ella estaba sufriendo por mi .. Así que me puse a llorar. Tadashi me abrazó para consolarme y me dijo:

-Te prometo que vamos a rescatar a tía Cass sana y salva.

Yo asentí y le di un dulce beso que me llenó el alma. De pronto me sentí mareado, parecía que debíamos alimentarnos pero no teníamos tiempo para cazar.

-Me siento mal, Dashi- le dije.

Me dolían los golpes que me habían dado los Nosferatus y la sed me estaba "matando".

Tadashi comprendió y le dijo a Rose, ella disimuló una mueca de desagrado hacia mi y fue a buscar algo lo mas rápido que pudo aún con su velocidad de vampiro y trajo tres ratas, ella bebió de una de ellas y le dio una a Dashi, los dos bebieron y a mi me causo un poco de repulsión a principio pero por mi sed me pareció buena idea así que espere a que Rose me diera la rata pero no me la daba así que me sentía cada vez más mareado. Dashi se dio cuenta de eso y le quitó la rata y me la dio. Ella se excusó diciendo que temía que a mi no me gustara la idea.

Nos alimentamos rápidamente y seguimos buscando para encontrar a tía Cass. Mientas buscábamos y caminábamos rápidamente ella nos explicó que podíamos beber sangre de animales en caso de emergencia pero que no podíamos hacerlo siempre, a fuerza necesitamos la sangre humana.

Recorrimos casi toda la fábrica abandonada que estaba muy oscura hasta que encontramos un vampiro en uno de los cuartos que parecían haber sido bodegas pequeñas.

El vampiro de cabello castaño y muy atractivo nos dijo:

-Vienen a entregar a ese niño?

Tadashi me abrazo con fuerza, iba a decir algo pero Rose se adelantó :

-Primero déjanos ver a esa mujer que tienes y después te entregamos al mocoso... a eso venimos.

Dashi se sorprendió pero después me dijo al oído :

-No te preocupes Hiro, ella sólo tiene un plan.

Yo no sabía sí creer eso o no pero ambos nos quedamos observando a Rose y al otro vampiro. El vampiro soltó una carcajada y dijo:

-Está bien lo haremos de la manera más difícil. Tomen esta hoja de papel y vayan a esa dirección.-después de darnos la hoja prácticamente desapareció .

Dashi me abrazó con fuerza y Rose le dijo que efectivamente tenía un plan y que jamás dejaría que me llevaran. Obviamente yo no le creí pero eso no importaba.

Rose tenía la hoja con la dirección y nos dirigimos rápidamente al lugar que indicaba. Dashi me llevaba en brazos para que ellos se movieran más rápido.
Mientras nos dirigíamos a ese lugar yo sentía que Alastor sólo estaba jugando con nosotros pero lo único importante era rescatar a tía Cass lo más rápido posible.

De nuevo estábamos en las afueras de san Fransokyo íbamos en el camino cuando se nos pusieron enfrente cuatro Nosferatus. Todo fue muy rápido, Dashi se puso enfrente de mi para protegerme.

-No van a tocar a mi Hiro... Malditas bestias! él mi tesoro! A quien más amo! -dijo él y me sonrojé.

El Nosferatus más corpulento de ellos atacó a Tadashi y cuando iba a golpearlo Rose lo quitó y el golpe me lo dio a mi. Sentí un gran dolor al caer al piso y de pronto el corpulento Nosferatus me subió en sus hombros y me llevó a una cabaña cercana con chimenea.

Al llegar vi como destrozaban a un pobre vampiro, lo quemaban y esparcían sus cenizas, todo eso por diversión. Quería que me soltara, el tiempo para salvar a tía Cass se estaba terminando y me estaba volviendo loco aparte no quería tener el mismo destino que ese pobre vampiro.De pronto se abrió la puerta de golpe y Rose golpeó a el Nosferatus de tal manera que yo casi caía al fuego pero Tadashi me atrapó en sus brazos salvándome de un peligro que parecía ser muy doloroso. Reflexioné unos segundos y llegué a la conclusión que Rose lo había hecho a propósito de nuevo.

Dashi y Rose salieron de ahí mientras él me llevaba en brazos. No podía ser, todo me dolía, no me habían dado tiempo para sanar mis heridas y eso era lo que nos faltaba, tiempo. Me sentí como sí estuviera caminado en las sombras, lleno de incertidumbre por el paradero de tía Cass.

Rose nos guió con la dirección que nos había dado el vampiro y llegamos al lugar donde marcaba dicha dirección. Era una mansión más grande que la de Alastor con un estilo muy occidental.

Los tres decidimos entrar a escondidas y entramos por un ventana. Ahí había un lugar muy lúgubre y casi nada de luz, no había electricidad y todo estaba alumbrado por muchas velas, veíamos varias sombras y no sabíamos de que eran. Rose se imaginó que las celdas estaban en dónde debía estar el sótano y ahí debían tener a tía Cass. Bajamos las escaleras sin hacer ruido y efectivamente ahí tenían las celdas. Nos escondimos al ver a dos vampiros que estaban cerca de una celda.

-Ya deberíamos beber toda la sangre de ese primor está muy guapa.-dijo un vampiro muy alto.

-El amo dijo que aún no, además es aburrida, no grita, no se queja no hace nada cuando la herimos y bebemos parte de su sangre, sólo dice que la matemos y repite dos nombres una y otra vez. Mejor ya vámonos ... -dijo el otro.

Los dos vampiros se pusieron en marcha, salieron de ahí y supimos que significaba eso. Cuando se fueron, Dashi y yo corrimos a esa celda y efectivamente ahí estaba tía Cass tirada en el piso con varias mordidas en el cuello, la ropa rota y parecía que estaba inconsciente.

Yo le iba a gritar su nombre, cuando escuchamos una voz familiar.

- Hola ! Que bueno que vinieron...-era Alastor. Yo me quede paralizado, pero tomé una decisión era hora de entregarme a él.