Good Father Kookgi°

5°

Despertó por los golpes en su puerta.

— ¡¡Ya despiértate enano!!, ¡¿Acaso no piensas ir a la escuela!? — su hermana gritaba desde afuera.

— Ya voy — pronunció débilmente.

— Te quiero en 10 minutos allá a bajo.

Yoongi sin ningún tipo de ánimo se levantó de su cama, fue al baño y se observo en el espejo, tenía los ojos rojos e hinchados, las mejillas rojas y el pelo desaliñado, se lavo la cara y se dió una ducha rápida, se vistió y bajo con sus cosas a la planta baja, su hermana al verlo se sorprendió de su aspecto.

— Por dios Yoon, te ves demacrado, aguanta un poco más, ya casi te gradúas — bromeó.

Yoongi se sintió mal al recordar que ya casi al graduarse arruinó su vida, como pudo sonrió.

— Ya ansió ese día.

Se sentó en la mesa, el desayuno se veía demasiado apetitoso, pero en su estado no tenía ganas de comer además de que sintió náuseas, pero se obligó a comerlo, aguantandose las arcadas. Su madre lo miro con preocupación.

— Yoonie si no te sientes bien no vayas a la escuela, más tarde te llevo al médico.

Yoongi negó.

— No mamá, solo que estoy cansado pero no es para tanto, bueno me voy.

Se despidió y salió antes de que su progenitora dijera otra palabra; camino más rápido para no encontrarse a JiMin, llegó más temprano a la universidad por lo que eran pocos los estudiantes que rondaban por ahí.

Se fue a los baños y desecho todo el desayuno, se lavo la cara y fue a su aula, encontrando a JiMin en su asiento, con pasos lentos se fue dirigiendo ahí; al llegar simplemente dejo sus cosas y se sentó, bajo la mirada acusatoria de JiMin.

— Y bien, ¿Me vas a contar el porque saliste corriendo ayer y cuando fui a tu casa no me abriste la puerta? — pregunto molesto.

Yoongi no aguanto y soltó el llanto, JiMin rápidamente lo abrazo, acariciándole la espalda. El castaño se sintió mal por ver así a su amigo, pero no entendía el porque de su llanto. Yoongi se calmo cuando llegó el profesor, frotó su cara y se dispuso a poner atención.

Cuando llegó la hora del almuerzo, apenas Yoongi y JiMin estaban guardando sus cosas cuando alguien les hablo.

— Yoongi, te hablan — dijo una chica cerca de la puerta.

Yoongi y JiMin curiosos fueron, viendo a Jungkook recargado en la pared, levanto la mirada cuando vio a Yoongi.

— Yoongi, ¿Podemos hablar?, A solas — dijo con expresión sería.

Yoongi temeroso asintió, Jungkook le hizo seña de que lo siguiera y así lo hizo, JiMin diciéndole que le debía una explicación más tarde.

Llegaron a la planta más alta del edificio, está estando abandonada, se metieron a un aula y Jungkook se recargo en la pared, antes de hablar suspiró negando.

— Yoongi sobre lo de ese asunto.......

Él ya se esperaba las clásicas palabras.

— Lo siento — se sorprendió — Lo siento por haberte hecho eso, debí haberme puesto condón o ni siquiera debí haberme acercado a ti, creeme que a pesar de la fama que tengo no soy un hijo de puta que evade sus responsabilidades, no soy tan idiota como para dejarte todo a ti, tampoco para abandonar o negar a un hijo que es mío, entiendo talvez arruine tu vida pero, si planeas seguir con esto te aseguro que me haré cargo, después de todo yo también soy responsable.

Yoongi se quedó boquiabierto, procesando las palabras, el se esperaba que le pidiera abortar o que le dijera que el bebé no era suyo o incluso amenazarlo con no decir que el era el padre.

Comenzó a llorar, Jungkook rápidamente se acercó y lo abrazo, Yoongi se aferró a él.

— Shh ya, no te preocupes, no te dejare solo en esto.

— Creí que........ tu.....

— No soy tan desgraciado.

Estuvieron así unos minutos hasta que sonó el timbre, ambos chicos se separaron, Jungkook sonrió y limpio las mejillas de Yoongi, este sintiéndose más ligero.

— ¿Nos vemos en la salida entonces?— pregunto Jungkook.

Yoongi sonrojado asintió, Jungkook dejo a Yoongi en su aula, JiMin esperándolo hecho un mar de dudas.

— ¿Me explicarás?

Aprovechando que el profesor de la hora que tenían no había llegado, Yoongi le contó todo, JiMin lo abrazo.

— Debió ser muy duro para ti, es bueno que se haya hecho cargo porque si no, yo mismo le cortaba su amiguito a ese idiota.

Yoongi río por el comentario.

— Encerio Yoon, cualquier cosa puedes contar también conmigo, yo te siempre te voy a apoyar.

El pálido se preguntaba que había hecho bien en la vida para tener a un amigo tan bueno como JiMin.

~°~

Llegó por fin la hora de salida, ambos chicos caminando a la entrada principal, Jungkook en cuanto vio a Yoongi se separó rápido de sus amigos.

— Yoongi, ¿nos vamos? — sonrió.

— Si — pronunció tímido.

— Bueno chicos nos vemos después — dijo, dejando a sus amigos confundidos, y a las chicas enfurecidas.

El pálido solo seguía a Jungkook, este viendolo distraido tomo su mano.

— Es mejor ir así, no quiero que te caigas.

Yoongi se sonrojo; llegaron a una heladería muy colorida, un ambiente bastante alegre en realidad.

— Lo siento, no se me ocurrió otro lugar al cual ir — se disculpo apenado.

A Yoongi le pareció tierno, sonrió.

— No te preocupes, me gusta mucho el helado — sincero.

Entraron, ambos pidieron su helado y se sentaron en las mesas que estaban dentro del establecimiento, el azabache por fin animándose a hablar.

— Entonces Yoongi, ¿Tus padres ya saben de......?

Negó —. Aún no le he dicho nada a mi madre, tengo miedo.

— ¿Cuando piensas decirle?, Yo estaré ahí para cuando decidas decírselo.

Yoongi se alarmó, el aún no se sentía listo.

— No me siento preparado.

— Yoongi, algún día se tienen que enterar.

— Si, pero aún no estoy listo para decirlo — suspira —. Solo déjame pensarlo.

Jungkook asintió comprensivo, el también tenía miedo de decirle a sus padres, aunque ya fuera un adulto y viviera por su cuenta.