Katsuyu week | 2021

Katsuyu Día #3: Pro-Hero

Sus pasos se detuvieron justo frente a un gran cartel eléctrico, seguramente actualizado durante la tarde. Había pasado por el mismo lugar el día anterior y también en la mañana, durante su patrulla, y el contenido entonces era diferente. Pero no se detuvo ante él porque estuviese interesado en el producto en sí. Aunque jamás lo admitiría en voz alta, se había detenido por la modelo en el anuncio.

En el letrero iluminado que se erigía en aquella pared blanca de una tienda cualquiera, lucía en plano medio, la heroína profesional de estación lluviosa "Froppy", o Tsuyu-chan para los amigos, solo que su traje de heroína había sido reemplazado por lo que parecía ser un delgado vestido de color verde oscuro, ceñido al cuerpo, con un delicado escote en V, cuyos bordes se hallaban demarcados por cintas de color negro. Su sonrisa era radiante y hermosa, sus mejillas dejaban ver un suave pero apreciable tono rosa que no hacía más que añadirle perfección a su imagen, y aquellos ojos negros y profundos se apreciaban ligeramente entornados, a causa de su amplia sonrisa.

El objetivo del anuncio era promocionar la venta un nuevo protector solar con aroma a menta para el recién comenzado verano, y también seguir el consejo de la heroína de cuidar y proteger las playas de la contaminación.

Suspiró y sonrió más para sí mismo que para cualquiera que se le pudiera cruzar. Desde que Froppy había entrado en el top 20 de héroes profesionales en Japón, la había estado observando con más frecuencia en revistas, anuncios y entrevistas. Era bastante satisfactorio poder observarla allí a donde quiera que fuese.

Observó la hora en el reloj negro y naranja de su muñeca; su patrulla estaba próxima a terminar, y decidió que sería buena idea regresar temprano a casa. Podría darse una ducha y preparar la cena, quizás incluso podría dejar el entrenamiento para el día siguiente, el cual, tendría libre.

Una vez en la agencia, avanzó hacia los vestidores y se cambió rápidamente su traje de héroe por ropa de civil; una playera negra con estampado de calavera, unos jeans rasgados con costuras en color naranja y sus características botas negras. Cargó su bolso al hombro junto a la chaqueta que decidió no usar, y comenzó a caminar hacia la salida.

Sin embargo, mientras más se acercaba a la puerta, pudo reconocer una figura familiar, esperando por algo, o alguien, allí de pie. Frunció el ceño al distinguir la cabellera verde y mirada cabizbaja, una vez llegó a su destino.

– "¿Qué estás haciendo aquí, Deku?" – su voz grave logró sobresaltar al joven que se encontraba esperando por él.

– "¡Ah! Kacchan, lo siento por venir sin avisar..." – comenzó, retomando la compostura – "La verdad... No te molestaría si no fuese importante"

Aquellas últimas palabras lograron captar su atención. De modo que, sin pensarlo demasiado, suspiró, derrotado. Sabía ya que sus planes de una noche y cena tranquila, habían cambiado así, tan repentinamente con su aparición.

En el pasado, seguramente se habría enfadado y lo habría enviado a volar, antes de siquiera escucharlo. Pero los tiempos cambian, y con el inevitable paso de los años, él había cambiado igualmente. Su suspiro fue enteramente de resignación, si el peliverde requería de su ayuda, no había forma en que pudiera negarse.

– "¿Vamos a un café entonces? Estoy agotado, no me apetece charlar en la calle"

– "Por supuesto Kacchan, te prometo que no tardará mucho, te dejaré libre poco después de la puesta de sol"

El rubio sacudió la cabeza en respuesta, y decidió no añadir nada más. Ambos hombres caminaron en silencio por la avenida principal, rumbo a un café cercano donde pudieran charlar a gusto.