Olímpicos

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-Papá – Senti un tiron en la cintura lo cual me hizo llegar estrellarme en Loki el cual estaba considerablemente lejos de él 

-¿Quien eres y qué buscas en mi esposa? – La sonrisa perlada se desvaneció de su rostro y miró a Loki, sus ojos se iluminaron de manera extraña, casi como los de Heimdall cuando ve en el cosmos

-Loki... Hijo de Laufey... Un Jötunn – Me miró como si quisiese una explicación lo que se me hizo sumamente raro pues no lo conocía en realidad y solo provocó que me hiciera para atrás abrazando el brazo de Loki

-No has respondido a mi cuestión, extraño y qué más da que sea un Jötunn – Solté su brazo lentamente mire a Zeus con curiosidad

-¿Tu eres mi padre?

-Puede ser una trampa, jamás has visto a tu padre, no puedes solo intuir que es el – Me dijo entre dientes mirándolo como un cazador a su presa, listo para atacar

-Apártate Jötuun – Amenazó el celestial lo que me hizo enfurecer y interponerme a el

-No te dirijas así al rey de Asgard y mi esposo – Abrió los ojos con sorpresa ladeo la cabeza

-Creí que era el trofeo de Odín por la batalla en Jotunheim

-¡No somos trofeos! – Reclame molesta – ¡Odín nos quiso como un padre!

-¡Después de robarte de mis brazos!

-Tu me abandonaste en un campo de batalla

-¿Eso te dijo? ¿eso crees? – Sus ojos rogaban misericordia y melancolía haciendo que algo en mi interior se hiciera suave y compasiva con él, en sus ojos había tristeza y esperanza

-Papá – Camine a él de nuevo rápidamente escapando de Loki lo abrace de nuevo y él me apretó contra su pecho toscamente, tanto que sentí sus músculos contraerse

-Mi niña – Acarició mi cabello  con gentileza, voltee a Loki y el celestial extendió una de sus manos a dirección de mi amado – No vengo con ningún conflicto conmigo, no quiero dañarlos

-Es curioso que lo digas – Mostró su máscara ante los demás, parecía rencoroso y cauteloso como un zorro – Aparecer como si nada después de que Odín desaparece es sospechoso, no trates de engañarme

-Como podría... ¿No eres tú el dios de las mentiras? – Hice la seña de seguridad que tenemos el me miro algo dudoso pero caminó lentamente a nosotros y cuando estuvo lo suficientemente cerca, atrapo en un abrazo incómodo riendo gustoso – Bienvenido a los Olímpicos, hijo mío, te llevaras de maravilla con mi hermano Hades, puedo presentirlo.

-¿Que tratas de decir... Zeus? – Pregunte dudosa de no saber como llamarlo

-Lo sé llevara tiempo que me llames como me gustaría, y me refiero a que e venido por ti, para regresar a casa, nuestro hogar, el Olimpo regresara a su gloria

Por amor (Loki y tu)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora