Cartas a Vlerat

II

Escribo una carta más, dónde solo puedo expresar la verdad de mi sentir. En la que nada importa más que tú.

Podría decirte tantas cosas, quisiera que supieras todo lo que me haces sentir, la seguridad que siento al estar a tu lado es única.

Eres lo mejor que cruzó por mi vida, sigo pensando ¿Cómo es posible que de tantos rincones en el alma hayamos decidido ser solo esto? Tal vez en otra vida volvamos a coincidir; en otra vida con miedo inexistente, para que vuelvas a romper los esquemas, llegando a mis sueños.

Te amo, amo cada chispa que te caracteriza, amo tu inocencia de niño, tu espíritu, tu carisma; amo cada mirada, cada recuerdo y cada uno de los días que pase a tu lado. No como lo soñamos, sino como lo que simplemente decidimos ser, sin complicaciones –si no tener complicaciones es guardar el amor en una caja fuerte y jamás abrirla–. Te amo, porque cualquier persona que viera como nos miramos o incluso nos sonreímos sabría lo que realmente somos y nunca admitiremos ser.

Con nostalgia en los ojos Anne.