XII

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Alex

Te he dicho cuántas veces he aspirado a ser distinta, pero nunca explico el porqué de mis motivos. Detesto cuando los médicos me indican seguir lo absurdos pasos de la hipnosis porque lo veo y ya estoy harta de su jodida risa, es lo peor que pueden hacerme. Quiero ser distinta no para salir de fiesta o tener mil y un amores, quiero ser distinta para estar con mis padres, para hablar con mis amigos, comer nieve de limón sin que interrumpas o digas que lo agrio de los grumos te molestan, subir a la montaña rusa y dejar de pensar.

El incidente vuelve y me avienta a un infinito obscuro y doloroso en el que estás, sentado, siendo mi único escape. Pero veo que estas empezando a cansarte, no de mí si no de lo que tienes que enfrentar para que esté bien.

Si fuera diferente no estarías aquí, atado, porque así veo tu presencia. Harías tu vida, comerías lo que te gusta, vestirías la horrenda chaqueta café durante los días lluviosos en lugar de ponerla en mi espalda. Pero no puedo, no puedo ser excepcional, o tal vez soy tan excepcional, que me es difícil hacer todo esto, y decirte que lo hagas por mí parece absurdo. En fin, gracias y hasta siempre.

~Anne

Cartas a VleratDonde viven las historias. Descúbrelo ahora