•Promesas• (Frerard)

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Eran las 7:05 am, estaba en mi cuarto ajustando mi corbata y colocándome mi saco, Mikey no dejaba de gritarme que bajara que ya era tarde, él a diferencia de mi si disfrutaba ir al colegio, era menor que yo solo por un año, baje de mala gana, estaba arto de esa estupida institución.

-¡Al fin bajas!-Dijo enojado- Es el primer día y quieres llegar tarde Gerard-

-En primera no me grites ¿Que te pasa enano? Yo soy el mayor aquí, segunda, tú bien sabes que me jode ir a ese lugar- comenzamos una discusión cuando la voz de papá nos hizo callarnos-

-¡ESTOY ARTO DONNA! No pienso seguir gastando en ese fracasado, es que no se cansa de causarnos problemas ¿Rehabilitación? ¿Enserio?-gritaba desde su oficina- Es un fracasado, no logra nada y no gastaré más en sus estupideces-

-No digas eso Donald, es nuestro hijo, él y Mikey-La interrumpe-

-Mikey si es un buen hijo, no como el otro- se escucho como papá salía de la oficina, se quedó perplejo cuando nos miró a mi y a mi hermano en la sala-C-creí que se habían ido- Dijo algo tenso- Mamá me miró, era evidente que había llorado-

-Hijos nos-nosotros- interrumpí a mi madre-

-Se lo que soy papá-No podía alzar la cabeza y sentía mi voz quebrándose- Se que no estás orgulloso de mi, sé que soy una molestia y que sobró en esta familia-Tome el valor y lo mire con mis ojos inundados- No te preocupes, yo tampoco estoy orgulloso de mi, yo sé que morirme sería algo increíble pero aquella vez que lo intente falle, no necesitas pagar nada, yo estaré bien- Me di la vuelta y salí, Mikey solo lo miro con odio y salió tras de mi-

Caminaba mientras secaba mis ojos y trataba de calmarme, solo quería tirarme a llorar y gritar hasta más no poder, sabía lo que papá pensaba de mi pero nunca había escuchado sus platicas con mamá, era obvio que yo no debía existir, era experto en esconder mis emociones, siempre tenía cara de enojo o tristeza pero sabía responder "estoy bien" mientras mi cabeza quería pedir ayuda a gritos, bastó unos pasos para recuperarme y fingir que todo iba bien.

-Gerard y-yo n-No...-Me di la vuelta y me acerque a Mikey-

-Oye, no necesitas decir nada, tú me escuchaste, se lo que soy, y no quiero que te sientas mal o culpable como siempre, no es tu culpa ser tan perfecto -reí y sacudí su cabello- El río un poco pero se veía triste-

-Lamentó gritarte hace un rato Gee-

-Yo también lo hice así que, todo bien nerd- Lo abrace por el cuello y ambos reímos-

-Iugh no me abraces Lerdo-bromeó y ambos reíamos mientras caminábamos-

Si bien mi hermano era la única chispa de luz que tenía mi vida, lástima que papá lo llevaba a muchas actividades extras acabando las clases, él tenía toda la tarde ocupada y llegaba de noche, apenas podíamos hablar, llegaba muy cansado y no lo culpo, yo no podría hacer todo lo que Mikey hace, siempre pensaba por qué no pude ser como él, soy su hermano mayor y soy un fracaso total, 16 años y ya no encontraba el rumbo de mi vida, solo quería intentar una vez más cortar mis muñecas, tal vez ahora si funcionaría.

Llegamos al colegio, mi hermano se fue por su lado y yo por el mío, fui a mi casillero y comencé acomodar mis cosas, estaba en mis asuntos cuando Bob se puso atrás de mi sin darme cuenta, lanzó mi cabeza haciendo que mi frente se estrellara en en la puerta.

-¡MIERDA!- Grite mientras ponía mi mano y me sobaba el golpe- Bob solo río con sus amigos-

-Lindo cabello Way, veo que "cambiaste"-me di la vuelta y lo vi con cara de odio y temor, mi estatura era casi del mismo tamaño que la de el, cosa que no importaba por que yo era un marica- pero sigues siendo el pendejo Virgen que todos odian, nos vemos en clase- se fueron y me dejaron solo, asote mi casillero y fui al baño para ver mi frente.