𝐄𝐋 𝐉𝐔𝐄𝐆𝐎 𝐃𝐄 𝐔𝐍𝐀 𝐑𝐎𝐒𝐀 [𝐁𝐨𝐫𝐫𝐚𝐝𝐨𝐫]

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𝑅𝑒𝑐𝑢𝑒𝑟𝑑𝑜𝑠

𝑆𝑎𝑟𝑛𝑎𝑖

La plática con mi tío Luca me dejó demasiadas dudas, aún no comprendo a qué se refería con que no se toda la verdad.

¿Qué verdad debo saber?

Muerdo la parte de arriba del bolígrafo mientras tamboreo mis dedos en la sólida base de mi escritorio, después de la plática se fue, solo me dijo que esperaba verme en la fiesta de los Nikolaou para poder volver a platicar.

Ese era otro tema el cual me causaba inquietud, la gran fiesta de mascaras.
Demasiados pensamientos para mí tan atormentado cerebro, paso mis manos por mi cara en señal de frustración al igual que suelto un suspiro pesado. Mi cabeza me duele de tanto sobre pensar las cosas, tal vez estoy exagerando o tal vez simplemente pueda pasar lo que tanto estoy pensando.

Necesito un poco de relajante así que saco mi cajetilla de cigarros para tomar uno y encenderlo, doy la primera calada y siento como de manera lenta me empiezo a relajar.

Transforme mi otro relajante por esto, los dos son dañinos pero al menos el cigarro no me hará parar al hospital por una sobredosis.

Hace ya más de siete años que no consumo nada de drogas, la experiencia de estar en un centro de rehabilitación junto con otros drogadictos es simplemente un entorno demasiado deprimente.
Algunos salen de ese círculo vicioso, otros simplemente engañan al sistema haciéndose pasar por alguien que ya salió de las adicciones para simplemente salir y volver a consumir.

No todos empiezan a drogarse por el mismo motivo, unos empiezan por querer sentirse "bien" y escapar de todo eso que los atormenta, otros simplemente la probaron con el fin de encajar con alguien o simplemente por curiosidad.

Aunque esa curiosidad puede ser el causante de tu muerte.

Yo la pobre gracias al imbécil de mi ex novio, tenía apenas dieciocho años, era una adolescente demasiado estúpida e inmadura. Los nos conocimos en una junta que tuvieron su padre y el Don, yo apenas empezaba a hacer encargos los cuales siempre me dejaban con secuelas como no poder dormir por qué sentía que esas personas que mataban iban a venir por mi cuando yo cerrara los ojos.
Ese día había regresado de hacer un encargo, venía toda temblorosa y demasiado ida por lo que el Don sugirió que podría distraerme un poco con el hijo del líder de la 'Ndrangheta. La idea no me convenció demasiado pero al final no me quedo otro remedio que aceptar.

Me llevaba dos años de diferencia por lo cual el era más mayor que yo, el noto la inquietud de mi cuerpo, noto como después de musitar cierta cantidad de palabras me quedaba completamente inerte entre los recuerdos de mi cabeza y los sucesos que habían pasado.

El solo me dijo que me daría algo para calmarme, me enseñó una bolsita la cual en su interior traía un polvo blanco demasiado fino. Parecía sal, con su dedo agarro un poco y me dijo que lo tenía que inhalar, la verdad nunca entenderé del por qué le hice caso a ese idiota.

Tal vez acepte en ese momento por mi falta de tranquilidad, solo quería sentirme tranquila así hubiera sido el mínimo tiempo posible.
Al momento que di la primera inhalada sabía que todo iba a cambiar.
Nos empezamos a conocer de a poco, platicábamos de cualquier estupidez solo para pasar el momento alejados de nuestro entorno, siempre que platicábamos había droga de por medio. En la mansión Martinelli no consumía ni una gramo pero cuando estaba con el podía consumir una bolsa entera.

Mi primera vez la verdad ni siquiera lo considero como una primera vez normal, los dos estábamos extremadamente drogados que no sabíamos ni siquiera que estábamos haciendo en ese momento.

De ahí empezamos una relación demasiado tóxica, todo lo solucionábamos con sexo y drogas, duramos más de seis meses en ese círculo tan destructivo. Terminamos todo cuando el me dio una cachetada por una discusión que estábamos teniendo, desde ahí nos dejamos de ver pero mi cuerpo cada vez más necesitaba cantidades más grandes de droga y sexo.

De alguna forma encontré un cierto "escape" con esa sustancia y el tener polvos casuales con cualquier mujer u hombre de algún club, hacia todo eso por que creía que eso no me afectaría.

¿Si a él no le afectaba por qué a mi me iba a afectar lo que hacía?

Pero entendí que me estaba autodestruyendo solo por qué creí que un poco atención y relación sexual era tener un amor verdadero.

Yo no sabía con claridad el verdadero significado de la palabra amor, sin embargo lo asocie con cosas demasiado erróneas que ninguna relación debería de tener o vivir.
Es algo demasiado irónico que yo como parte de una mafia que trafica todo tipo de estupefacientes, esté en contra de que las personas consuman pero no puedo evitarlo.

Esa sustancia es el veneno más destructivo que puede existir.
Doy otra calada a mi cigarro mientras me inclino mas en mi silla, suelto todo el humo que permanecía en mi boca para después observar los opciones que tengo de vestido, ya que será un fiesta de mascaras debo ir con una que tenga un diseño un tanto elegante pero al mismo tiempo que sea un tanto extravagante.

Sigo pensando que una fiesta a estas alturas es una completa estupidez pero a la vez hay algo que me dice que debo ir y que por nada del mundo debo faltar, no pienso seguir comiéndome la cabeza con mis pensamientos negativos.

Solo dejaré que pase lo que tenga que pasar.
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