Min y Park

De regreso a la oficina, Park

Regresa con prisa, sin esperar al equipo pues este se queda haciendo el papeleo de la redada, pero Park se adelanta porque quiere cerciorarse de algo que sospecha y que sabe que leyó en la carpeta en su escritorio.

Su cabello es un lío desordenado que medio acomoda cada ciertos minutos como un tic, que lo hace ver atractivo sin ser conciente de ello.

La camiseta que lleva terminó con algunos rasguños y manchas y cuando va entrando a la comisaría lo nota, además de un ligero olor a sudor por estar todo el día vigilando el sitio del encuentro, así que se retira la camiseta que cuelga luego de uno de sus bolsillos y sin pudor alguno sigue caminando por la comisaria mientras retira las balas restantes de su arma y la guarda en su funda que cuelga de su cinturón, busca en sus bolsillos y encuentra un chicle que coloca en su boca y comenzá a masticar, es una costumbre que tomó desde que entrenaba pues con el chicle distrae su hambre y relaja la presión constante que mantiene en su mandíbula cuando algo lo molesta.

Saluda a algunos a su paso y le roba un refresco de lata a uno de los oficiales de camino — ¿Cómo supiste, guapo?, gracias —le dirige un guiño y una sonrisa coqueta mientras abre y se toma de un trago la bebida.

Llega a su escritorio y saca una camiseta de uno de los cajones, la lleva a su rostro para olerla, sube los hombros y los baja mientras hace una mueca con la boca, "mch, bueno, está más decente que la que traía" piensa, luego extrae también del cajón un desodorante en spray y se lo dispersa por el torso, se medio coloca la camiseta gris, después de aventar de nuevo en el cajon el envase, toma la camiseta negra que cuelga de su bolsillo, la extiende en el aire y ve que tiene algunos rasguños y manchas, "todavía sirve" piensa para sí mismo y la avienta en el mismo cajón, cierra con el pie mientras busca en su bolsillo del Jean una llave, con la que abre un cajon superior y extrae una carpeta amarilla de ahí, busca rápidamente entre la hojas y exclama — lo sabía, sabía que había leído esto —apuntando un renglón en la hoja.

También se da cuenta que no está su arma oficial en el cajón, “¿quién se metió con mi arma? Estoy casi seguro que la deje aquí, ¿o fue en el locker?" pensó.