𝕭ᴀᴊɪ ᴋᴇɪsᴜᴋᴇ༎
"𝐄res una Piedra Preciosa que yo he descubierto, brillas en lo más profundo de nuestra oscuridad."
"Baji, ¿quién es la piedra preciosa realmente? ¿Lo eras tú? ¿O soy yo?"
♔︎| Fanfic 2 de mi Saga𝐓𝐨𝐤𝐲𝐨 𝐑𝐞𝐯𝐞𝐧𝐠𝐞𝐫𝐬.
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-¿Qué tan difícil es enamorarse de alguien que si sonría por mí?.
-¿Porque lo dices hijo?. -Pregunto observando el cuerpo tumbado de su hijo en el sillón con su rostro pegado a la almohada.
-Suki nunca sonríe para mí.
-¿Has echo algo para que sonría para ti?. -Inquirió alzando una ceja, como esa chica se atrevía a no sonreir ante los esfuerzos de su pequeño.
-No. -Susurro levantando su cabeza sorprendiendo a su madre quien soltó una exclamación frustrada.
-¿Entonces porque te quejas?.
-No lose.
Su progenitora suspiro y continuó con su labor de limpieza ese fin de semana mientras su hijo seguía lamentándose infantilmente en el sillón.
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-Hola. -Le saludo con una sonrisa.
Suki lo observó algo molesta unos segundos. -¿Qué haces aquí?.
-Te seguí.
-¿Porque?. -Pregunto mientras cerraba sus ojos buscando la paciencia necesaria en lo más profundo de su alma para no golpearlo.
-Sospechosamente nunca estas en tu salón, faltas a clases lo suficiente para decir que estarás reprobada a final de curso, y además.. -
-La verdad Chifuyu. -Ordenó con severidad tensado al contrario.
-Baji me pidió que te siguiera para verificar que no sales con nadie.
-Ese no es asunto de ninguno de los dos. -Espetó sin mostrar expresión alguna y apresuro su paso notando que llegaría tarde a su reunión con su mejor amiga.
Usagi le había citado para ir a un restaurante a comer lo que tanto le gustaba pero quería ir con ella. No sé negó ni mostró disgusto, al contrario, quería demasiado a su amiga para negarle algo.
Por su lado, Baji reviso su teléfono disimuladamente, Chifuyu le había escrito diciendo que su misión había fracasado.
Apresuro a su madre a hacer su pedido al mesero en el lugar para así poder terminar rápido y ver a su pelirroja vecina.