"𝙿𝙸𝙴𝙳𝚁𝙰 𝙿𝚁𝙴𝙲𝙸𝙾𝚂𝙰" [Baji & Lector]

Oᴄʜᴏఌ︎: 𝐋𝐀 𝐅𝐄𝐑𝐈𝐀

Se encontraba sintiendo una emoción extraña dentro de ella. Algo que jamas sintió en el lugar donde creció y se crió.

Era una sensación que se asemejaba a los días de verano cuando salía con Usagi a la playa o otros lugares para divertirse.

-¿Quienes son ellos?. -Pregunto el pelinegro que había entrado en su casa después de que su mamá lo dejara afuera por haber llegado tan tarde el Lunes después del festival.

Había insistido debido a que la había acompañado hasta la casa de Usagi y debido a eso había llegado por la madrugada a su casa. Solo le estaba agradeciendo como decía Usagi.

"Cuando alguien haga un gesto bonito por ti, se agradecida".

No admitía que había sido un gesto bonito porque era más considerado como acoso haberla seguido a dos metros como un acosador.

-¿Quienes son?. -Repitió tomando la fotografía de la pizarra donde había demasiadas fotos. Fotografías que Usagi había pegado en ese pequeño pizarrón de tiza como un regalo para ella, era la única razón por la que nunca lo deshecho.

Suki suspiro dejando su tarea de un lado y viendo la imagen.

-Amigos de la secundaria de Usagi. -Respondió viendo la escándalosa foto donde los únicos tranquilos eran Takuya y ella. Por tranquilos se refería a que los otros estaban haciendo poses extrañas.

-¿Y el?. -Pregunto ahora mostrándole la imagen donde aprecia únicamente Takuya con un balón en su mano. -En la mayoría parece el más cercano a ti. -Susurro frunciendo el ceño sin dejar de verlo.

-Es el más tranquilo de ese grupo, me agrada más. -Respondió girandose de vuelta a su escritorio pata continuar con su tarea.

-¿Te gusta?. -Inquirió sin titubear. Suki negó sin importancia.

Cuando decía que era el más tranquilo de ese extraño grupo se refería a que su nivel de estupidez era menor al de los demás, sin contar a Akkun.

-¿Y él?. -Pregunto quitando ahora una fotografía del pelirrojo en el que estaba pensando.

-Deja mis fotografías ya. -Espetó quitándoselas todas molesta. -¿Por qué estas en mi cuarto?. Vuelve a la sala a ver televisión o lo que sea.

-Ya, pero quien es el. -Insistió señalando receloso la imagen donde la estaba abrazando.

-Ya te dije. Y tengo tarea que hacer.

-Ya no preguntaré nada. -Dijo sonriendo ladino y se lanzó sobre su cama sin dejar de sonreír. -Suki. -La llamo aún recostado con su mirada en el techo. -¿Peleaste con tu familia por eso estas aquí?.

-No tengo que responder tus preguntas.

Baji cerro sus ojos sin dejar de sonreír, había algo incómodo cada vez que estaba cerca de ella, la mirada de la pelirroja se volvía diferente, normalmente su mirada era distante pero cuando el se acercaba era como si viera algo extraño en el que le molestara.