¡Aloviuc' ti muun! (Terminada)

Boy sad*16

Las energías le sobraban,dada a un super capacidad,podía continuar unas cuantas veces más,al igual que una máquina se movía a voluntad del operador, a menos que la maquinaria estuviera averiada y sus circuitos no dieran con la corriente.

Splendid podía continuar,unas varias horas e ignorar la realidad del cuerpo humano,llegando un sin número de veces a un orgasmo y recomponerse para dar a otro colapso en la lujuria.

Fliqpy,el cuerpo ligeramente fortalecido de Fliqpy,llegaba a un extremo más allá de un humano normal,podía seguir le el ritmo a un animal pero no a una máquina.

Un animal como Fliqpy,por más que luchará,nunca llegaría a seguirle el desenfrenado movimiento de su pareja,dejándolo en la discapacidad de otorgarle el placer necesario al peliazul.

Frustración sexual,así podían categorizarlos fácilmente.

Así lo pensaba Splendon't.

Nadie aparte del pelirrojo tenía la capacidad necesaria para poder fornicar con su "hermano", ambos eran en todos los aspectos unas maquinas,seres que parecía que no se cansarán con nada y que seguirían con su frenesí hasta que llegará un tercero a detenerlos o el tiempo no les dé lugar para poder seguir.

Antes ya había experimentado la decepción de que su acompañante nocturno no pudiera seguir en la cama.  Las ansias de más y que la chica no pudiera por la perdida de conciencia.

Era molestó y perturbador.

Le perturbaba que la realidad fuera que la única forma de tener una vida sexual satisfactoria es acostándose o establecer una relación con su contrario en todos los sentidos.

Con una lata de cerveza en la mano,sentado a las afueras de una bodega de mala calidad, contuvo un grito de repudió.

No pudo evitar sentir asco desde lo profundo de su garganta y unas arcadas involuntarias. Quiso dejar la cerveza e irse,pero el imaginar que estaría solo en el departamento mientras que su compañero está haciendo sus cositas en el bosque le dejaba un amargo sabor.

Un sabor que quemaba más que cualquier licor.

—Hola~—Sus rojos cabellos se erizaron,como un animal sorprendido, y sus ojos fueron a parar en la voz cantarina que la hablo. Lummpy,como siempre en todo y todos lados,se sentó junto a Splendon't y le quitó la lata por la mitad.

—Buenas noches...—Respondio cortante,sin quitarle una mirada resentida al adulto,que sorbía sonoramente el contenido.

—¿Porque tan solito? —Aparentando inocencia,lo miro con sus grandes ojos.

—Nada importante,igual,ya me iba—Se estaba levantando,pero una mano casi del doble que la suya lo sujeto con fuerza de la muñeca y por la sorpresa no pudo resistirse. Quedó sentado en una de las piernas del peliazul.

—Esas son puras mentiras—Paso uno de sus brazos por los hombros de Splendon't,intentando tener más contacto.

—Eres un pesado,un jodido pesado y metiche de mierda,maldito estorbo—Gruño rabioso,sin poner mucha resistencia. Curioso de las intenciones de Lummpy.

—Bah,bah,tus palabras son tan aburridas y básicas,amigo,más originalidad,estoy seguro que estás citando a algún miliciano corrupto—Dio un largo sorbo a su cerveza y después jadeo contentó.

—Eres una persona miserable que está saciando su rabia con veneno para adultos... De los que matan lento y disimulan la pena,por lo que veo —Leyo distraídamente el contenido de la etiqueta.

—Soy psiquiatra profesional,puedo darte algunos horóscopos y ayudarte a vivir como se debe.

—Menudo fraude.