La hermana de Lila (Cinco H.) COMPLETO

Capítulo 3

Lo confieso.

No estaba en mis planes y actúe impulsivamente, pero diablos, este beso se siente tan bien.
Después de unos segundos nos separamos. Sentía mis mejillas arder como nunca.

-¿Qué fué eso?- me mira con un gesto que no logro descifrar, ¿Perplejo?, ¿Encanto?, Incluso podría pensar enojo, pero no estoy segura.

-Yo...- me quedé pensando qué decir.

Él se aclara la garganta, al parecer disimulando una sonrisa.

-Creo que debemos de irnos-

-Si, buena idea- apreté los labios sintiéndome incómoda. Pasé a su lado en dirección a la salida pero él me detiene.

-Iremos a mi manera-

-¿A qué te refieres?- lo miré y el estiró su mano hacia mi. Yo la tomé dudando.

-Cierra los ojos- dude un segundo pero hice lo que pidió. Sentí una energía absorber mi cuerpo y al abrir mis ojos estábamos en la cocina de Elliott.

-Oh mierda- agarré mi cabeza con las dos manos. Tenía que aparentar que nunca había hecho algo así.

-Se te quitará en un rato- dice sonriendo

-Vaya. Pensé que nunca sonreías- el volteó los ojos y se dirigió a la sala.
Ahí se encontraba Lila sobre Diego tirado en el sillón.

-No está muerto-

-¿Decepcionado?- le responde Lila

-¿De verte a ti?. Siempre- sonríe sarcásticamente.

-Cuánta hostilidad para ser tan pequeño-

-¿Él está bien?- dije acercándome a Diego. Estaba inconciente.

-Si, lo estará- ella estaba terminando de costurarle una herida en su abdomen.
En eso escuchamos un ronquido, volteamos y vimos a Elliott dormido y aún atado a la silla.

-¿No lo desataste?- le pregunta Cinco a mi hermana

-¿Tenía que hacerlo?-

Suspiré y comencé a quitarle las sogas a Elliott, él se despertó asustado.

-Tranquilo, no te haré nada-

-Oh, muchas gracias. Tengo tantas ganas de ir al baño-

-Listo-

-Gracias, gracias- dice corriendo hacia el baño.

Caminé a la alacena y saqué unas cosas para hacer sándwiches. Cuando terminé los puse sobre la mesa de la sala, Elliott y Lila habían llevado el cuerpo de Diego a la habitación. Se sentaron en el sofá y comieron.

Después de unas horas Lila se quedó en el cuarto con Diego y yo estaba acostada en un sillón viendo hacia el techo,  Cinco sentado en el sillón de junto.

-Entonces, ¿sólo es la apariencia que tienes de un niño?-

-Asi es-