El oficial baja la velocidad del auto hasta detenerse, Craig estaba a punto de cuestionar sobre la razón por la que se detuvieron en Carls Jr. cuando Barbrady le interrumpió— Vamos primero por unas hamburguesas. No has desayunado apropiadamente, yo invito, muchacho. —ofrece con una sonrisa amistosa.
Santo cielo, Craig no puede hallarse a sí mismo negándose ante la muy tentadora oferta, han pasado meses desde que probó una— Claro. —ya puede sentir su boca salivar a mares de solo pensar en un mordisco.
— Bien, después continuaremos con la búsqueda. —Barbrady asiente satisfecho. Probablemente el oficial también ama este tipo de alimento, la alegría en su rostro es una buena pista a considerar. Craig por su parte no puede evitar recordar a Thomas, su padre siempre comía porciones monstruosas— ¿Cuál vas a pedir?
— Una Super star. —no duda ni por un segundo su elección. Es y será por siempre su favorita.
— Okay, ¿Quieres ir? —con el pulgar, señala al solitario local detrás suya.
Craig lo medita por unos segundos:
Ir al local implica muchas cosas.
Entre ellas, es ser recibido con miradas penetrantes de los demás.
Miradas de extrañeza y miedo.
Con susurros y chismes que sus sensibles oídos podrán oír sin importar lo que haga.
Todas palabras desagradables.
Sabe de sobra que no será bienvenido allí. Ni en cualquier lugar realmente.
Es un convicto y es todo lo que los demás pueden ver.
— No. —dice inmediatamente.
— Bien. Vuelvo enseguida, chico. —desprendiéndose breve, Barbrady sale del auto de policía con un suave golpe de la puerta.
En silencio, Craig espera en soledad.
—...
—...
—...
Y sin percatarse, su mente se vacía lentamente, como el aire cálido que se fuga de un gran globo aerostático al caer en tierra.
En piloto automático, su cuerpo respira y se mueve por inercia.
— ...
A veces es tan difícil.
Difícil tener las energías para actuar.
Para cambiar las cosas.
Es tan sencillo dejar suceder el tiempo...
De permanecer como un ente inamovible que trasciende al caos de líneas y rayones que es el mundo que lo rodea, y dejar de tomarle importancia al desorden para encontrar su propia paz dentro de sí mismo...
No involucrarse y apagarlo todo...
Difuminar la entropía como un pequeño ruido blanco detrás de sus oídos...
Para no enfrentar las cosas...
Para dejar...
Pasar...
El dolor...
— ...
Simplemente...
Vivir sin existir...
Hace todo más fácil...
Divagar divagar divagar.
Craig es experto en ello.