POR FAVOR

185 11 2
                                    

- Qué quieres? - dije mirándolo molesta 

- No te vayas - insistió 

- Estoy de más - me separé - Y cuando sobro, me voy - dije bajando las escaleras 

Todos estaban en la sala. 

- Tu no estás de más - me alcanzó a esa velocidad 

- Me desaparecí tres días, y ya corriste a tu ex Kol - miré como Davina bajaba las escalera

- La llamé para que te busque Clarissa - me dijo enojado 

- Y entiendo esa parte, pero ya estoy aquí, vengo a tu casa y te encuentro encerrado con tu ex a corta distancia? - le grité 

- No sabes como son las cosas - me dijo en el mismo tono 

- Sabes? Es confuso - miré a todos - Detesto los labiales de frutilla - dije viendo su labio 

- Eres un idiota - soltó Rebekah 

- El no correspondió mi beso Clary - soltó Davina 

- Y porque debería de creerte a ti? - le dije enojada - Y no te arranco el cuello porque estoy tratando de controlarlo - le grité 

- Puedes confiar en mi? - me pidió Kol 

- No lo sé, tu dime - crucé los brazos 

- Digo que si - reaccionó 

- Entonces tus actos no respaldan lo que dices - y me fui caminando a la puerta 

Salí a la puerta, y trataba de abrir el auto. Kol estaba detrás de mi. 

- Solo quiero hablar - dijo en susurros 

- Ah sí?  De que q.. - me interrumpió con un beso 

Nos separamos, y nos miramos 

- No quiero hacerte daño, no puedo hacerlo - me miró acariciando mi rostro 

- Ordena lo que sientes, pero antes una cosa - lo miré 

- Qué? - dijo de inmediato 

- Si tienes que pensarlo tanto, entonces quédate con ella - y levantó la mirada - Si me amaras, no debería ser opción, si quiera una prioridad. Solo lo sabrías. 

Entré al auto, me sequé una lágrima y conduje a casa. Papá estaba en el sofá, y me miró extrañado lo que llegué sola.

- Y Kol? - me miró 

- Siendo un idiota - me senté junto a el 

- Solo tienes que pedírmelo y esta vez lo mato yo - me aseguró 

- No tienes que ponerte así - me recosté en sus piernas - Estoy bien 

- No quiero que te hagan daño, es todo - me confesó 

- Tengo a mi familia - lo miré - Creo que no puedo estar más agradecida al destino por ello 

- Ya está la comid... - mamá me miró - Y Kol? 

- Creo que no hace falta su presencia por hoy - dijo Damon 

Katherine se dio cuenta de lo que quiso decir y solo se resignó a ir al comedor junto a nosotros. En la mesa, comíamos y ellos me contaban de los siglos pasados, de como eran, de su situación amorosa en el 64 y en 2009. 

- Mañana irás a la escuela? - me miró Stefan 

- Es la idea - afirmé 

- Creo que será bueno - apoyó Katherine - Retomar las clases 

DarlingDonde viven las historias. Descúbrelo ahora