Darling

EL MIEDO

Después de una hora, Justin se emborrachó y no quedó opción que lo saque del bar. Como indiqué, los niños estaban esperándome. Subimos al carro y Peter ataba con sogas al hombre.  

- Bien, a donde iremos? - pregunté

- A mi casa - respondió Clary 

- Clarissa - la reté 

- Qué? - me miró 

- Tus padres son unos aburridos, querrán entregarlo a la policía - solté 

- Y en donde dices tu? - preguntó Peter 

- Mi casa - sonreí 

- No - se negó Clay 

- No seas aburrida, no quieres divertirte en familia? - la miré 

- Ya que no tenemos opciones - dijo a rastras

Un teléfono comenzó a sonar, y era el de mi cuñada. 

LLAMADA 

- Si? - preguntó Clary 

- Clary, May, tiene un ataque de pánico - anunció Alaric

- Vamos para allá - aseguró Peter quitándole el teléfono 

FIN DE LA LLAMADA

 - Iremos a casa, y luego a la tuya - me miró Clay 

- Está bien, los dejo allá - acepté

Escuchaba como Justin comenzaba a reaccionar, y se alteró al verse atado. Clay volteó al oírlo, y lo torturaba con su don. 

- Ya niña, te divertirás en un rato - reí 

- No sabes las cosas que quiero hacerle - respondió 

- Creo que tengo unas cuantas ideas - Peter le siguió el juego 

- Ustedes me caen mejor que mis propios hermanos - admití satisfecho 

Los niños bajaron y en menos de media hora dijeron que andarían por casa. Conduje a casa, y llevé a Justin a la sale, lo até con precintos. Kol, Elijah y Freya se hicieron presentes. 

- Y esto Niklaus? - miró Elijah 

- Me divierto con mis cuñados - reí 

- Klaus, ellos lo saben? - me retó Kol 

- Claro - abrí mis brazos 

- Si? Ellos están en la escuela en este momento - me confrontó Freya 

- Vamos, no sean aburridos - terminé de taparle la boca con cinta 

- Niklaus - me retó Rebekah quien bajaba las escaleras

- Ahora tu hermanita? - blanqueé los ojos 

- Madre te matará cuando vuelva por la tarde con Hope - advirtió 

- No podías quedarte quieto no es así Klaus? - me retó Kol 

- Qué les pasa? - bufé 

NARRA CLARY 

- May - corrí a ella 

- Está aquí, me quiere hacer daño - gritaba en llanto 

- No hay nadie aquí - aseguré

- Yo vi una sombra detrás de mi cuando estaba en el baño, no estoy loca - temblaba 

Le dediqué una mirada a Peter. 

- Yo me quedo con ella - me aseguró 

Asentí y con Alaric subimos. 

- Hay alguien? - le pregunté