Suena la alarma a las 6.30 de la mañana. La apago y vuelvo a dormir hasta que suene la próxima. A las 7 suena la última así que me levanto de la cama dirección al lavabo.
Ya en el, me miro en el espejo.
Hacía demasiado que no me levantaba tan temprano y mis ojos lo notan, apenas se abren. Me recojo el pelo en una especie de moño alto mal peinado y me lavo la cara con agua fría. Cuando ya he acabado de hacer todas las necesidades matutinas, salgo del lavabo para dirigirme al armario.No se que ponerme asi que obto por un básico de mi armario, unos tejanos negros con roturas y una camiseta con el cuello de pico la qual deja ver mi sujetador negro lencero debajo de ella.
Ya estoy vestida y me miro en el espejo entero de mi habitación. Los tejanos realzan mi caderas y el tirante del sujetador lencero que sale de la camiseta blanca, le da un toque atrevido.
Me doy la vuelta y me encuentro a mi madre sentada en la cama, con una sonrisa la cual desprende orgullo.-Buenos días cariño. -me dice sonriendo.
-Buenos días mamá- le respondo poco cariñosa.
-Empezamos el curso de mal humor? - Pregunta y yo niego con la cabeza, le muestro una sonrisa falsa a lo que me lanza una mirada de comprensión y me abraza mientras me dice en el oído: -Todo va a salir bien cariño- le apreto con fuerza, lo necesitaba. Me mira a los ojos.
-Estás preciosa- me dice yendose de mi habitación para que pueda acabar de arreglarme.
Me pongo mis converse blancas, los pendientes que me regaló mi abuelo, colonia por todo el cuerpo y cojo la mochila para bajar rápido las escaleras. Al final de ellas me encuentro con Rocky que me saluda efusivamente y yo lo acaricio tan contenta como él. Cuando consigo apartarlo voy a la cocina, cojo el desayuno y me despido de mi madre con un beso en la mejilla.
Ahora si que si, me dispongo a empezar el primer día del curso, de mi último año en el instituto.
-
Llego al instituto diez minutos antes ya que salí de casa demasiado temprano.
Todavía no ha llegado nadie así que decido entrar para esperar por los pasillos, los cuales también están vacíos.
Llego a la puerta de mi clase y como veo que está entreabierta, decido entrar.
Mientras me dirijo hacia una mesa de la tercera fila, veo que en la del profesor, hay un chico sentado encima de ella de espaldas hacia mi. Parece más mayor que yo, pero tampoco mucho. Por lo que puedo ver desde el ángulo en el que estoy, tiene el pelo corto y de un color castaño claro y un poco de forma ondulada. No veo mucho más de él porque sigue de espaldas, pero cuando hago ruido con la silla para sentarme, gira levemente todo su cuerpo haciendo que pueda examinarlo mejor.
Lleva unos tejanos azul fuerte, combinado con una camisa lisa blanca de botones que se le ajusta al cuerpo, esta bastante fuerte, sin exagerar, pero lo está.
Tiene los ojos claros, aunque no puedo distinguir el color desde la distancia en la que estoy, pero parecen muy bonitos. Debajo de ellos, se encuentran sus mofletes llenos de pecas las cuales le cubren toda la cara, los labios rosados y una mandíbula bastante marcada.
Al verme, parece sorprendido pero lo dejó pasar cuando decide hablar.
-Buenos días?.-Dice acercándose donde me acabo de sentar.
Al escuchar su voz y ver como se levanta hacia mí, se me cae la mochila al suelo y me empiezo a poner nerviosa de pensar que llevaba demasiado tiempo observandole.
-Buenos...buenos días.-Digo tartamudeando mientras cojo torpemente la mochila.
Nota mi nerviosismo y casi de forma natural, me sonríe, dejando ver sus dientes perfectos. Vuelvo a subir la mirada a sus ojos y ahora si que puedo apreciarlos mejor. Son verdes con tonos azules alrededor y las pestañas larguísimas acaban de perfeccionarlos. Tenía razón, son unos ojos preciosos, pero su mirada fija en la mía, me intimida de tal manera, que no puedo apenas aguantarla.
-Eres alumna de Xavier?-Pregunta apoyando sus brazos en la mesa que me he sentado.
-Si, Emma.-Contesto intentando calmar lo que sin razón se aceleró.
-Hugo, soy profesor en prácticas.-Dice volviendo a enseñar su perfecta sonrisa, y sin entender porque, sonrio yo tambien.
Suena el timbre y la clase se empieza a llenar. Leia es la última en llegar, pero se sienta a mi lado ya que le estaba guardando el sitio.
-Buenos dias Emm.-Me saluda dándome un beso en la mejilla.-Ese es el profesor que nos dijo Ana?-Pregunta mientras esperamos a Xavier ya que todavía no llegó.
-Hugo se llama.-Digo indiferente de mi.
-Es muy guapo.-Contesta con mucha énfasis.
-Sin más.-Respondo mientras vuelvo la mirada a la dirección en la que está Hugo.
-Va no mientas...-Resopla. No le contesto y en ese instante, llega Xavier disculpándose por haber sido el último en llegar mientras nos pone una absurda excusa y al acabar, presenta a Hugo.
-Como veis tenemos a un nuevo miembro. El es Hugo y está haciendo prácticas así que nos acompañará durante todo el año. - Y se aparta para dejar que hable Hugo.
-Bueno yo soy Hugo como ya dijo Xavier y deciros que si necesitáis ayuda en la materia podéis contar conmigo. - Explica bastante avergonzado mientras las dos chicas de detrás nuestra se están riendo y haciendo bromas sobre su atractivo.
Xavier explica lo que haremos este año en la materia y cinco minutos antes de que acabe la clase nos deja recoger.
-Vamos a comer juntas verdad? - Pregunta Leia mientras estamos recogiendo.
-Sí, pero vendrá Adrián vale?... -le contesto informando.
-Pfff, por lo menos vamos a comer tacos-Dice con una sonrisa en la cara porque los tacos son su comida favorita aunque no muy convencida de que venga Adrián, no lo soporta cosa que no entiendo.
-Vale pero el próximo día toca Sushi. -Le digo haciendo un gesto para que estemos en paz.
Me responde que sí y nos vamos a la próxima clase, no la tenemos juntas así que se despide dándome una palmada en el culo a lo que yo le guiño el ojo mientras bajo las escaleras.
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Todo por nosotros
RomansaEmma empieza su último año de instituto antes de que su vida de un giro de 180°. Por una parte, mantiene una relación estable con Adrián, su pareja desde hace apenas 8 meses, pero lo que ella no sabe es que, el primer día de su último año, aparecerá...