One-shot Hot

Eren

* Ataduras, mordiscos, sangre...
* Este fragmento de historia se encuentra en "El amor que no te confesé" capítulo XX y XI
* Editado para poner como protagonista a ________ x Levi, siendo secuestrada por Eren.

P.O.V. __________

*CLICK*

Ese sonido retumbo en mi cabeza.
Todo daba vueltas, los parpados me pesaban tanto que no podía abrirles y sentía un leve pinchazo en el cuello, intente llevar las manos hasta la nuca para frotarla pero al probar a moverlas se producía un sonido metálico de arrastre, pesaban, en ese momento me di cuenta de que era ese sonido el que había escuchado hace unos segundos, el cierre de unas cadenas que ahora mismo me retenían. Mis sentidos se despertaron en ese momento y un sentimiento de estar observada se implanto en mi pecho. Forcé a mis parpados ha abrirse lentamente y lo conseguí pero no se veía absolutamente nada, aún achinando la vista todo estaba a oscuras pero aún así la sensación seguía en mi pecho, intente hablar pero mi boca estaba tan seca que me costaba producir saliva.

+ ¿Hola?

Fue lo primero que consegui decir esperando que alguien escuchara mi leve susurro.
De repente una vela se encendio en una de las esquinas del cuarto empezando a alumbrar la habitación, seguía intentando adaptar la vista a la creciente luz que no llegaba a alumbrar la cara de mi secuestrador, cerre los ojos por el punzante dolor de cabeza que me atravesó, empezando a escuchar unos pasos moverse por la habitación, el crisporroteo de la llama consumiendo la cuerda que le daba vida empezó a sonar muy cerca de mi oído. Inconscientemente apreté mis parpados cuando note algo cálido chocar contra mi cara y una fuerte mano me agarro los mofletes para apretarlos con fuerza, haciéndome soltar un quejido de dolor pero mi voz no llego a durar mucho tiempo ya que sentí una intromisión en mi boca, una lengua entro agresivamente empezando a luchar con la mía, quería moderle pero la presión que ejercia con su mano sobre mi boca hacía que no pudiera cerrarla y por ende no podía morderle. Lo sentí alejarse pero aún seguía negándome a verle, note como poso la vela en alguna superficie lejana ya que su luz se había alejado un poco y escuche el ligero sonido de la madera.

Sentada con la espalda apoyada en la pared, las muñecas encima de mi cabeza encadenadas y las piernas dobladas cerca de mi pecho, en esa cama, pude notar como la presencia de al lado se sentaba conmigo, el colchón se empezó a hundir en su dirección notando como su mano empezaba a acariciar mi pierna. La sensación era aspera pero a la vez delicada, se empezó a mover por la cama hasta acabar subido completamente encima de ella, dos manos comenzaron a acariciar mis piernas las ásperas caricias mandaba escalofrios por mi cuerpo pero lentamente empezaron a descender, deteniéndose en mis tobillos, agarrándoles suavemente y empezando a hacer circulos sobre ellos con los pulgares. Su voz me saco de todos los pensamientos y sensaciones de aquellos momentos, reconocí de quien era y eso solo me aterró más.

+______________ -Escuche como alargaba mi nombre, apreté los labios y por primera vez abrí los ojos, la luz de la vela iluminaba tenuemente su cara dándole un aspecto más terrorífico. Su nombre quería salir de mis labios pero me negaba a dirigirle la palabra- Que tal princesa ¿Dormiste bien?

- ¿Princesa? -Los apelativos cariñosos nunca fueron tu fuerte - ¡Me tienes secuestrada como narices me preguntas eso!

+ Es que como te resistias tuve que drogarte pero tranquila que solo llevas unas cuantas horas dormida.

- Que narices quieres -Sus pulgares seguían acariciando mis tobillos pero esta vez los apretaron con fuerza, obligándome a soltar un gemido de dolor- ¿Porqué haces todo esto?

+ Vamos _______, yo se lo que realmente quieres, yo te lo puedo dar - En ese momento sentí como tiro de mis tobillos clavándome las uñas y arrastrando mi espalda por el colchón dejándome totalmente tumbada y él colocándose entre mis piernas- Tu piel es tan suave...