❝ With You ❞ ˡⁱˢᵏᵒᵒᵏ ᵒⁿᵉ ˢʰᵒᵗˢ

Undici

Maths

ᴅᴏɴᴅᴇ ᴊᴜɴɢᴋᴏᴏᴋ ʟᴇ ᴘɪᴅᴇ sᴜ ᴛᴇʟᴇғᴏɴᴏ ᴀ ʟᴀ ᴄʜɪᴄᴀ ᴍᴀs ɪɴᴛᴇʟɪɢᴇɴᴛᴇ ᴅᴇ ʟᴀ ᴄʟᴀsᴇ ᴅᴇ ᴍᴀᴛᴇᴍᴀ́ᴛɪᴄᴀs

La siguiente clase después del descanso sería matemáticas. Y maldición, adora esa materia, no porque le guste los números, formulas, fracciones y esas cosas aburridas.
No no no no
Le encanta simplemente porque la chica que le gusta tiene esa clase tambien. Era la única materia en la que coincidían, pero siempre que llegaba todos los asientos que están alrededor de ella estaban ocupados, así que no le quedaba más que sentarse en la mesa de la otra esquina y admirarla desde lejos.

-¿Que les toca? -preguntó Jin llevando un poco de comida a su boca -A mi literatura.

-Mmm... Informática -respondió Hoseok checando su horario escolar y con una gran sonrisa, pues esa era una de sus clases favoritas por el simple hecho de que cuando acababan de realizar sus actividades, poder entretenerse y jugar online con sus amigos.

-Matemáticas -dijo Jungkook con aburrimiento y soltando un bostezo

-Ve el lado positivo, Kook. La podrás ver y si llegas temprano poder sentarte con ella -respondió Hobi mientras lo golpeaba con su codo en su brazo

-Si, supongo... Es que, me pongo nervioso cuando me acerco a ella, y lo más probable es que vaya a hacer el ridículo. -dijo mientras rascaba su nuca. Se había intentado acercar varias veces a Lalisa, pero cuando estaba frente a ella no salían palabras de su boca y sólo quedaba como un tonto. Siempre veía que chicos de otras aulas se acercaban a ella y le hablaban, conqueteandole. Así que, solo podía reprimir todos sus celos y empezar a maldecirse por ser alguien tan tonto y no poder hablar con la chica que le gusta.

-No pierdes nada con intentarlo. Que tal si... ¿Le pides su número? Así podrás hablar con ella a la distancia sin necesidad que te pongas nervioso -sugirió el mayor mientras lo señalaba con sus palillos de metal

-¡Oye si! -exclamó Hoseok exaltando a los otros dos chicos que estaban junto a él -Nuestro Kookie ya esta creciendo -lo abrazo enrollando sus brazos en el cuello del menor y limpiandose una lagrima falsa. Mientras que el menor trataba de quitar sus brazos de encima, y cuando lo logró, pudo respirar con normalidad.

El tiempo pasaba rápido y cuando menos se lo esperaban, la campana sonó, indicando que la siguiente clase empezaría en unos minutos.
Metió todas sus cosas a su mochila, pero cayó en cuenta de que le faltaba algo... Su maldita calculadora

Estaba más que seguro que la había guardado ayer por la noche en el pequeño bolsillo que tenía su mochila a un costado, pero al parecer ahí no se encontraba. Justo cuando más la necesitaba, no estaba.
Rendido al no poder encontrarla entre las cosas que tenía dentro de su mochila, empezó a caminar hacia el salón en donde tocaba la clase de matemáticas.
Y cuando entró, estaba como siempre. Demasiados alumnos ya dentro del aula y ningún asiento vacío cerca de ella.