Capítulo 8 S.T

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(EN EL CIELO)

Narra Ramón (Hermano de Flora)

Observó, impotente, la masacre. Desde que morí no le he quitado la vista a mi hermana y a sus Hijos (Es decir mis sobrinos), son mi prioridad, también me convertí en el "jefe", ja que el último se retiró.

Observó como mi hermana abandona el centro de la manada corriendo, ¿Que pretende hacer? Pienso, de seguro va a pelear junto al resto. Le hago un gesto a mi segundo al mando.

-Encargarte hasta que vuelva, devo ir- le avisó.

-Va contra las normas aparecer en el mundo de los mortales.- me recuerda.

-Lo sé, pero en esa manada hay mucha gente importante para mí, devo ir y pelear, ¡No me puedo quedar de brazos cruzados!- le repito.

No podrán ganar la batalla, no así, lo quieran admitir o no necesitan la ayuda.

-Si vas, iré contigo- dice Lourdes, la antigua "jefa"- mi hija esta allí abajo, no me quedaré de brezon cruzados- asiento.

-¿Habéis perdido un tornillo? Sois dos contra un ejército ¡Ni siquiera con vosotros dos los hombreslobo tienen alguna opción!- repite.

-Tal vez... tienes razón-admite-pero no iremos solos-sonrie Lourdes.

Narra Noor.

Mi supuesto padre se lanza contra mi con una daga de plata, busco rápido algo con que defender-me, de mientras esquivo sus ataques, cojo una rama que estaba en el suelo i la coloco enfrente de mi para parar los ataques con la daga, de mientras susurro hechizos que mi madre me enseño para debilitarlo.

-Verum consequi victoriam, et hoc est quod invocabo in telarum animalis omnium qui pugnant in gratiam in veritate et iustitia.- de repente unas figuras en forma de animal se hacen presentes, empiezan a salir del interior de las personas dejando ciegos a los hombres de mi padre, incluyéndole.

A lo lejos, veo a mi mate, aprovechando ese despiste para quitarse del medio a unos cuantos de encima, empieza a oler el aire, Ramon sabe que estoy aquí i eso parece animarlo mas a pelear i con la energía renovada, sé que me quiere buscar i ponerme a salvo, pero es una cosa que no voy a permitir: si ellos luchan, yo lucharé a su lado.

(...)

llevamos horas peleando i los primeros rayos de sol han aparecido, me pude escapar varias veces de mi padre, no podia contra él, la noche pasó y nadie obtuvo la piedra.

-Noor- habla Ramon, cuando nos reunimos en la manda, tuvimos que retroceder i ceder mucho terreno, también flaqueaban los hombres, en resumen estábamos perdiendo- Lo conseguiste?- pregunta, niego bajando la mirada- No te preocupes, estas bien?- no hago nada no se que responder a eso.

-Físicamente si- contesto- no la pude conseguir, os falle- dije pero un gruñido hace que mire a Max.

-Noor, no fallaste, nos ayudaste, gracias a ti y a tus hechizos- se acerca i todo el mundo se calla atentos a los movimientos del Alpha- ya nos hubieran derrotado, gracias- el Alpha me hace una reverencia, haciendo que todos los de su manada (los que habían observado la escena) también la hacen, incluido mi mate, la Luna de la manada i su hermana pequeña.

Leí en los libros, que mi madre, me leía sobre costumbres de los lobos, había una página que decían que cuando el Alpha se inclina ante alguien: es porque en verdad esa persona se ha ganado su respeto i ese Alpha confía ciegamente en esa persona.

Me quedo en shock, quiero decirle que no hace falta, que se levante.

-Alpha, no hace falta- el Alpha se levanta i me mira empieza a assentir- Lo hago, porque en verdad me siento parte de esta manada, tal vez me precipite y luego de esto- si es que sobrevivimos, me digo para mi misma- me gustaría quedarme i formar una familia con Ramon- el Alpha me mira serio- se que podemos ganar, lo presiento y lo sé.- digo de forma firme i segura.

-Ya la habéis oído- empieza a hablar el Alpha- Esta es nuestra tierra nos pertenece por derecho, hemos perdido mucho como para rendimos ahora, yo iré y luchare para conservar las tierras, los que estén a favor que me sigan los que no, coged las cosas e iros, no os obligare a ir- dice para girarse e irse hacia el campo enemigo transformado hago lo mismo i le sigo.

Pelearé por todo esto, veo a mucha gente seguirnos. Corren para luchar junto al Alpha.

De repente, escucho la voz del Alpha en mi cabeza, no solo la de él, si no la de Flora y Ramón también escucho voces de otras personas. Todas ellas con un mismo objetivo: salvar la manada.

No tardamos en llegar, mi padre (con su sonrisa macabra) lidera a los Trihibiridos en el intenso combate que se desarrolla sobre las casas más alejadas de la manada. A unos 4 kilómetros del centro.

De repente, todos dejamos de pelear, el Alpha, mi padre y los demás, se quedan estáticos, intento avançar pero hay una fuerza que me lo impide, ¿Que està ocurriendo? Observó a todos y les passa los mismo que a mí.

Mi mate y yo cruzamos las miradas sin entender nada y se que se está preguntando lo mismo que yo, miro hacia otros lados. Cierro los ojos, me relajo y como si de magia se tratara, empiezo a caminar.

Decido abrir los ojos, todos están estáticos, antes parpadeaban, y ahora ni eso. Poco a poco me voy acercando a mi mate, observó sus heridas, que no son pocas. Luego paso a su familia, ellos están igual, con bastantes heridas, pero aún así siguen luchando.

Luchando por su libertad, por su tierra, por sus seres queridos, por los fallecidos y, por supuesto, por los que vendrán en un futuro, todos luchan por todos, no les importe perder la vida, si con ello salvan otras personas, y eso es lo que más me inspira para continuar aquí.

Miro la frente, es hora de terminar con esto, cueste lo que cueste.

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