Lo Que Encontré

XII

Mientras tanto en Castellón...

- [...] ¿¡¡QUE!!?

Luisita no pudo evitar alterarse al escuchar esas palabras por todo lo que ellas significaban. Sabía muy bien que existía la posibilidad de que a Amelia le hayan mentido sobre lo que pasó verdaderamente, pero al oír esas palabras salir directamente de su boca una fuerte onda de electricidad le mordió los nervios, llevándola a comportarse mucho más afectada de lo que debía. Después de varios segundos enfocó su vista en Amelia, quien la miraba con los ojos abiertos y el ceño ligeramente fruncido y fue justo en ese momento que la rubia cayó de vuelta a la realidad y se dio cuenta de que su reacción no había sido la más adecuada considerando la situación en la que estaban.

<<¡Joder, Luisita, trata de controlarte!>> se pidió a sí misma en sus pensamientos.

- ¿Luisita? ¿Estas bien? ¿Por qué reaccionaste de esa manera? - le preguntó Amelia extrañada.

- Eh, nada, nada, nada. - respondió Luisita rápidamente negando con la cabeza. - Es solo que, que me sorprendí, eso es todo. - continuó evitando mirarla a los ojos.

- Ya... - la morena se quedó pensativa por varios segundos. Por alguna razón no confiaba en la respuesta que había recibido por parte de la rubia. - ¿Estás segura? - indagó.

- Si, si,si, estoy segura. - dijo la rubia mirándola a los ojos.

<<¡Estoy segura de que me cago!>> Pensó.

- Hmm, ya... - Amelia no dijo nada, solo estudio su lenguaje corporal. Era cierto que había perdido la memoria, pero no la vista, y se había dado cuenta del nerviosismo repentino de Luisita. - ¿Estás segura de que estás segura? - insistió tratando de comprobar si ocultaba algo o no.

- Que si, que si. - le respondió la rubia con seguridad moviendo la cabeza de arriba a abajo con una sonrisa afirmativa. - Es solo que me sorprendí al escuchar ese nombre porque me dio la sensación de que lo había escuchado anteriormente en alguna parte.

- ¿Conoces a alguien con ese nombre? - cuestionó Amelia tomando un trago de su copa de vino.

- No, no, no. - negó rápidamente. - No conozco a nadie con ese nombre pero creo que si lo he oído anteriormente en alguna parte. El problema es que no recuerdo exactamente en dónde.

- Pues, tal vez en las noticias. - comentó la morena moviéndose un poco en su asiento, adjustando su postura. - Cuando ella murió su muerte fue anunciada en todas las noticias y plataformas del país.

- Ah, pues debió de haber sido eso, tal vez escuche su nombre en las noticias. Es que, si como tu dices, si era una sicaria y una delincuente pues...era obvio que saliera en las noticias, ¿no? - Amelia asintió. - Oye, y...¿sabes cómo murió?

- Mmm, la verdad es que no lo sé. No estoy segura. - dijo la morena encogiéndose de hombros. - Hugo y mi padre me contaron que murió por unos balazos que recibió por parte de la policía una noche que intentó secuestrarme de nuevo, varios días después que los médicos me dieron el alta del hospital.

- ¿Eso te contaron?

<<Claro, no me sorprende. Si te hubieran dicho que en verdad nos estaban persiguiendo para matarme a mí, la situación huberia sido otra...>> Pensó.

- Sí, así es. - confirmó la morena.

<<Pues eso es imposible porque yo quedé en estado crítico y me tomó un año entero poder recuperarme después de haber estado en el hospital por varios meses. ¿Cómo podía intentar secuestrarte si estaba en el hospital?>> Pensó.