Pandillas entre la élite [Mitsuya Takashi]

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Invierno en el bosque

Narra Kurisu

El pecho lo tenía adolorido por respirar aquel aire gélido, estaba de noche y la nieve era mucha, mis manos estaban rojas por el frío al igual que mi nariz

Rin no estaba a mi lado, tampoco Fashiko mucho menos a Mazaki y Mazumi, les había pedido por favor quedarse en casa a estos 2 para que no se enfermen mientras que mis hermanos y yo buscábamos leña para el fuego

Pero algo salió mal, no los tenía a mi lado, los perdí, o me perdí

Quizás ninguno sabía orientarse bien en el bosque, mucho menos de noche

Con una roca afilada hacia marcas en los troncos de los árboles, todavía traía ramas para el fuego cargando en mi espalda, tenía la seguridad de volver a la cabaña en cuestión de minutos así que mi caminata no cesaba, aunque yo odie caminar mucho.

Pero no contaba con mi mala orientación, las pisadas ente el suelo me confundían ¿Eran de Rin y Fashiko? Están cerca de mi? No podía oírlos por el viento, ni llamarlos por qué mi garganta me dolía demasiado

Siempre deteste el frío, lo odio con todas mis fuerzas.

Debía verme como una zombie en este momento tal como me lo dicen mis compañeros, me niego a darles el gusto pero mis ojeras solo me hacen ver mal, mi mirada tampoco ayuda y mi palidez no se me ve bien.

Escuche ramas crujir a mi alrededor, quizás era un animal de la finca buscando refugio, tal vez el viento o tal vez era yo

No lo sabía, no podía ver bien nada, mis ojos dolían si los abría mucho, me entraba nieve

No me gusta estar aquí en invierno, tampoco me gusta estudiar aquí, solo me quedo por mi familia y amigos, solo por padre y los tíos.

Aunque no los vea seguido y me quedé más con los abuelos, incluso cuando madre nos a invitado a viajar con ella, tengo esperanza de pasar más tiempo con ellos si estoy aquí

Pero me gusta más el calor, y a madre también, y me da un abrazo fuerte siempre que me ve

Ella trabaja mucho como padre, pero ella nos invita a algunos viajes de trabajo, a padre no le gusta que estemos cerca de él y todos esos señores con rostro amargo de su trabajo

Pero padre es responsable, sabe que hacer y yo lo sé, Rin y yo lo sabemos muy bien

Para cuidarnos debe hacer sacrificios, para poder dar lo mejor de él necesita trabajar duro, así habrá recompensa.

Escuché algo caer por detrás, era un hombre, no lo ví jamás.
Escuché a los perros de la familia venir y ladrar, tal como en el simulacro normal

Vi aquella cabellera rojiza, Kazuma, mi abuelo.
Detrás suyo estaban Rin y Fashiko

Me cargó de inmediato, al subir a sus brazos ví detrás de él como los perros mordian a ese hombre desconocido, ví luces blancas traspasar por aquellos árboles y mucho ruido se hizo presente

-- no veas atrás. --me ordenó mi abuelo, no era sonriente como siempre, no me veía a los ojos como me enseñó

Se arrodillo y le pidió a Fashiko subir a su espalda, con un brazo sostenía a Rin y con el otro me sostenía a mi sín mucho esfuerzo, después de todo es un hombre muy fuerte

No sé cuánto tiempo paso, pero llegamos a la cabaña, yo era la única que todavía traía madera para el fuego, lo primero que hice al bajar de sus brazos fue reabastecer aquella salamandra bajo la antena mirada de todos, mientras que Rin me ayudó a hacerlo y Fashiko se mantenía abrazado al abuelo