Me aparto del abrazo rápidamente y salgo de la piscina. Recojo mis cosas y me voy a casa. ¿Por qué de repente me suelta eso?¡Me van a volver loca!
Saliendo de la casa de camino a la parada de autobuses se oyen los gritos de Karen y Alex llamándome, pero los ignoro.
Una vez llego a la casa me doy una buena ducha y me pongo un jersey no muy gordo y unas mayas, ya que por la noche hace más frío.
Llendo para mi cuarto me cruzo por la habitación de Luc, y nose por qué la marca me empieza a escocer. Es bastante raro pues hacía tiempo que no me pasaba nada con ella.
Oigo unos golpes dentro del cuarto de Luc, así que no me lo pienso dos veces y abro la puerta de sopetón. Lo que veo me deja aterrorizada.
Luc está tirado en el suelo sin fuerzas y con muchos arañazos en todo el cuerpo, a su lado está Raquel y otro hombre al que no conozco.
-Anda, mira quien está aquí. Parece que han venido a salvarte Luc.-ríe aquel hombre extraño.
Me acerco corriendo a Luc y lo abrazo muy fuerte, está inconsciente. -¿Qué le habéis hecho?.-digo mientras las lágrimas empiezan a salir.
-Intentaba hacerse el valiente y mira como ha acabado.- dice Raquel.-Peter puedes irte, con ésta terminaré rápido.- termina de hablar y aquel hombre se va por el balcón.
Mientras no mira intento despertar a Luc dándole palmadas en sus mofletes hinchados. Al hacer esto abre un poco los ojos.
-Luc ¿estás bien?.- le digo desesperada.
-Está perfecto ¿vale?, ahora vamos acabar con esto que tengo prisa.-me interrumpe Raquel. De nuevo siento las manos en mi garganta y una presión fuerte en mi cabeza, pero esta vez no me voy a desmayar, tengo que proteger a Luc.
-Jade, usa la marca.-dice Luc entre susurros.
-¡¿Tienes la marca?!.-grita Raquel con cara de espanto, ¿por qué?.
Levanto la mano hacia ella y la marca empieza a brillar, pongo todas mis fuerzas en ello. Pero nada sucede, lo sigo intentando esta vez con las dos manos, las gotas de sudor se resbalan por mi frente y ya casi no puedo respirar. Miro a Raquel y se le ve cansada pero sigue con la risita burlona en la cara, ya no parece una niña pequeña, ahora es toda una mujer, no tengo ni idea de como la he podido reconocer. Tras varios minutos caigo al suelo sin aliento.
-Has aguantado bastante bien, pero no me has podido hacer nada.-ríe Raquel.-Vamos a terminar ya esto, igual que lo hicimos con tu padre.
Ellos mataron a mi padre y ahora vienen a por mi para hacerme lo mismo, y yo no lo voy a permitir, por lo menos lo intentaré por mi padre.
Me levanto bruscamente del suelo y le enseño los colmillos, que de la nada se han vuelto enormes. Pongo mis manos contra su pecho y de mis manos sale una luz cegadora que la empuja con fuerza hacia a la ventana, a la que atraviesa cayendo al vacío, me asomo y justo antes de tocar el suelo desaparece.
Me doy media vuelta y voy hacia Luc que está tendido en la cama. Lo miro de cerca y parece que ya está más espabilado. Coloco mi mano en su frente y está ardiendo, por lo que bajo a la cocina a coger un trapo mojado y algún medicamento para bajar al fiebre. Me dirijo de nuevo al dormitorio y le pongo el trapo en la frente mientras le desabrocho un poco la camisa, pues está sudando un montón.
-Jade.-le oigo decir a Luc.Me vuelvo hacia él, pues iba a cojer el jarabe, y le cojo la mano.
-Dime.
-Cuando cojas el frasco del jarabe di esto.- se saca un papel del bolsillo y me lo entrega, ¿pero como quiere que lea esto? ¡si parece chino!
Afirmo con la cabeza y me giro a por el frasco. Una vez lo he cogido intento leer el papel y como si supiera el idioma en que está escrito en el papel desde que nací, lo leo de un tirón. Al terminar de leerlo unas luces de colores salen de mi dedo y se conecta con el frasco, llenando a este también de luces de colores. Lo cojo y se lo doy a Luc. Él se lo acerca a la nariz y lo empieza a respirar.
Me quedo embobada viendo como poco a poco todas las heridas que tenía desaparecen.
-Muchas gracias.- me dice Luc dándome el bote ya vacío.- y tú ¿estás bien?
-Solo algo cansada.-sonrio aunque por dentro tenga ganas de llorar.
-Se te nota un poco pálida y además has gastado mucha energía al lanzar el rayo contra Raquel.- se calla, me mira y sonríe.- ven siéntate.
-Vale.-me siento a su lado y me apoyo en su hombro. Estoy demasiado cansada para mantenerme recta.
-Oye, ¿dónde está Alex?
-Ni idea.
-Pues menudo guardian.-dice susurrando.
-¿Guar....qué?
-Nada, nada.
-No ahora me lo di....- y me quedo medio dormida sin darme cuenta.
Luc me tumba en su cama, me tapa con las sábanas, coje su móvil y marca un número, aunque no se a quien llama pues me quedo dormida.
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☆You are my star☆
Fantasía-Are you sure? -Yes, sure -And ...why? -Because you are my star.