Existen daños que pueden desaparecer o simplemente puedes arreglar, pero, un accidente que llega a dejarte ciego ¿se puede arreglar?
Al principio fue algo nuevo para el de orbes grises, por un golpe algo severo en el cráneo quedó totalmente ciego...
"Si tan solo supiera distinguir lo bueno de lo malo"
Días, semanas, minutos y horas enteras habían pasado, su rutina volvió un poco mas a lo que fue antes, sus entrenamientos seguían igual que siempre e incluso le agregaron algunos mas.
Su vista amenazaba con volver muy seguido, los dolores de cabeza aumentaban conforme su vista dejaba de ser tan borrosa, pero aun así no lograba distinguir nada y si, lo desesperaba a grados mayores, estaba harto de ser un maldito inútil.
Porque si, sus entrenamientos y posición no cambio nunca, pero por su detalle de visión no había ido a ninguna misión fuera de los muros desde hace ya mas de un año, comenzaba a darse por vencido.
Pastillas y tratamientos de rehabilitación eran lo único que llenaban sus horas del día, solo estupideces y nada relevante.
"La posibilidad de que recupere la vista es muy baja, no mejora, esta empeorando"
Aquellas palabras que escucho por "casualidad" en la oficina de Erwin, la castaña fue la autora de tal frase, tan pocas palabras acabaron con la poca esperanza que tenia.
Aquel día se encerró en su habitación poniendo de pretexto que necesitaba descansar, ni siquiera dejo entrar a su alfa a darle un poco de consuelo, por supuesto que necesitaba sus palabras de aliento y un gran abrazo impregnándolo con su aroma, pero quería estar solo.
Perdió la cuenta de cuantas maldiciones salieron de sus labios, al igual que no supo a que hora cayo completamente dormido, solo recuerda estar llorando en silencio sobre su cama odiando su estúpida situación, demasiado patético para ser el.
Odiaba ser un omega, odiaba tener que pagar siempre por lo que hacían los demás, odiaba no poder observar sus ojos azules o su linda sonrisa, odiaba todo y justo ahora solo quería desaparecer.
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Suspiro por milésima vez en el día harto por el maldito dolor de cabeza, era su día libre así que solo bajo a desayunar y volvió a su habitación, supuso que su celo llegaría al notar su aroma algo alterado, pero por alguna extraña razón no fue así.
¿Levi? - pregunto Nanaba pasando su mano frente a su rostro - ¿Estas bien?
No - soltó tratando de mantenerse despierto -
¿Que sucede? - interrogo sentándose a su lado colocando su mano en su hombro
Mi cabeza duele - hizo una mueca cerrando los ojos - Demasiado
Vayamos con Hanji, sabrá que hacer - sonrió - Erwin esta fuera en una Reunión, supongo que llegara por la noche, sera mejor que te quedes conmigo
