Hacia una semana que llevaban una convivencia dentro de los límites de la normalidad, cada cual asistía a sus actividades dentro del elenco y al llegar al complejo de apartamentos cada uno ocupaba su espacio evitando molestar al otro. Claro que Hoseok y Jimin tenían sus momentos en soledad sin dejar a León participar pero era por su extensa amistad y no por dejarlo de lado.
Se habían acostumbrado bastante al español y Jimin debió reconocer que no era tan insoportable como creía, solo se incomodaba cuando el otro lo miraba como si fuera un plato de comida que ansiaba devorar.
Pero Jimin sabía muy bien cómo lidiar con eso y no lo dejaba sobrepasar los límites establecidos.
Las cosas con Yoongi parecían ir bien y aunque se extrañaban demasiado estaban felices de que cada uno estuviese triunfando en sus carreras.-¿Dime cómo van las cosas con tu nuevo compañero?- preguntó Yoongi a través del teléfono.
-Mejor, ya no insiste con querer conquistarme como al principio-
Jimin le había contado a Yoongi todo lo que había pasado con León desde que lo había conocido en el barco y luego cuando descubrió que era uno de los músicos de la compañía. Quería ser claro y que nada fuese un malentendido entre ellos.-mmm, debería viajar a Londres y marcar mi territorio a ese tipo- espetó Yoongi celoso mientras miraba a su adorado esposo a traves de la pantalla de su celular.
-Me encantaría que vengas y no por él, sino para tenerte en mis brazos. Igual puedes quedarte tranquilo, te aseguro que tiene bien en claro que estoy casado y enamorado de mi esposo- explicó sonriendo al ver el ceño fruncido de su esposo.
-Te amo, y te extraño, cada vez más, ya no sé si voy a poder aguantar otro año lejos de ti. Si bien todo este tiempo nos ayudó para entender lo que realmente tenemos, no puedo evitar sentir que puedes conocer a alguien mejor y al fin dejarme por haber sido un idiota por tanto tiempo- susurró con algo de desesperación sin dejar de mirarlo.
-¿Sabes que te amo verdad? Idiota y todo siempre te he amado y eso no ha cambiado en todos estos años, creo que ahora con todo este tiempo alejados mi amor por ti se ha hecho aún más grande y más fuerte. Pueden aparecer cientos de personas a mi alrededor pero nadie jamás será Min Yoongi, el amor de mi vida y el único a quien quiero hacer feliz, así que deja todos esos tontos pensamientos y confía en mi, nunca podría amar a nadie como te amo a ti Yoon- exclamó sin dejar de sonreír todo el tiempo en que sus sinceras palabras salieron de sus labios.
-No te imaginas las ganas que tengo de verte, de tocarte, de hacerte el amor, de estar a tu lado y no volver a separarnos. También te amo más que a nada en este mundo y solo pienso en el momento en que volvamos a estar juntos, es solo que no puedo evitar sentir miedo, a lo mejor porque en un momento de nuestras vidas fuí más estupido de lo normal y creí que mi felicidad estaba lejos de ti, pero te aseguro amor que este tiempo alejados me enseñó que nunca podría ser feliz si me dejaras de amar si no tuviera la certeza de que volverás a mi lado en cualquier momento. Me lamento cada día por haberte pedido el divorcio cuando claramente soy un inútil sin ti y realmente no puedo creer toda la paciencia que has tenido conmigo. Te juro amor que no volveré a lastimarte jamás porque si hay algo que he comprendido todo este tiempo es que mi amor por ti es tan grande que me ahogaría a mi mismo si te cansaras de mi y me dejaras-
Las lágrimas de Jimin rodaron sobre su perfecto rostro y Yoongi no pudo evitar largar algunas también.
-Te amo- replicó Jimin sonriente aún con sus ojos rojos.
-Te amo- repitió Yoongi lanzando una hermosa sonrisa de encías.
Los escenarios de toda Inglaterra cayeron rendidos ante el fabuloso talento de Park Jimin y el ballet Nacional. Jimin se había convertido en toda una celebridad en Europa y se sentía tan bien, ser admirado y aclamado de pie era algo a lo que Jimin aún no podía acostumbrarse y se maravillaba cada vez que esto sucedía.
Los tres meses que llevaban de gira habían valido la pena. Cada esfuerzo, cada ensayo, uno y cada uno de los dolores en su cuerpo habían valido, porque en ese momento estaba disfrutando de una vida plena y llena de triunfos.
Habían terminado con su presentación en Liverpool, la última en esa ciudad así que decidieron salir todos juntos a festejar ya que al día siguiente emprenderían la vuelta a Londres.
Jimin caminaba junto a Hoseok y sonreía a lo grande por las locuras de su amigo.
Entraron a un bar, Philippe les advirtió que no se dejaran encantar por el alcohol y que fuesen medidos. Aunque él fue el primero en caer ante los enormes vasos de cerveza y whisky que allí se servían
Todos reian, cantaban y festejaban los últimos logros.
La prensa europea los catalogaba como el elenco musical más talentoso de los últimos tiempos y eso hacía que todos estuvieran satisfechos y felices.
El alcohol corrió como agua en el sistema de cada uno de los integrantes del elenco, un par de bailarines ayudaron a Phil a llegar a su habitación del hotel ya que solo no podría hacerlo.
Entrada ya la noche todos decidieron que era hora de acabar con los festejos y cada uno volvió a su habitación para descansar ya que al día siguiente debían salir de viaje temprano.
Jimin llegó recargado sobre el hombro de Hoseok, haciendo que ambos rieran por cualquier cosa.
El teléfono de Jimin sonó, este lo miró confundido ya que era muy tarde.
La imagen de Yoongi apareció iluminada y Jimin no pudo evitar sonreír al ver la foto.
-¡Amor de mi vida!- gritó al atender.
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Te he echado de menos
FanfictionJimin y Yoongi llevan siete años de casados y hoy Yoongi ha decidido pedirle el divorcio ¿el motivo? ni él mismo lo sabe, solo sabe que quiere volver a ser libre. Muy por el contrario de lo que hubiese pensado, Jimin no discutió, no lloró, no gritó...